Desbloqueando el éxito académico: El poder de las habilidades no cognitivas en la educación

MadridUn estudio realizado por las Dras. Margherita Malanchini y Andrea Allegrini resalta la importancia de las habilidades no cognitivas para el rendimiento escolar. Su investigación demuestra que habilidades como la motivación y el autocontrol son tan vitales como la inteligencia para el éxito académico. Además, el estudio revela que estas habilidades se vuelven más esenciales a medida que los niños avanzan en la escuela.

Un estudio con más de 10,000 niños de entre 7 y 16 años, utilizando análisis de gemelos y pruebas de ADN, exploró cómo la genética y el entorno influyen en el rendimiento escolar. Los hallazgos indicaron que los factores genéticos afectan las características de la personalidad y que su influencia aumenta con el tiempo. Los investigadores crearon una "puntuación poligénica" para medir la predisposición genética de un niño a estos rasgos.

Habilidades no cognitivas clave identificadas:

• Determinación
• Perseverancia
• Interés académico
• Valoración del aprendizaje

Estos hallazgos indican que la inteligencia no es el único factor crucial para rendir bien en la escuela. Las emociones y el comportamiento de un niño, influenciados por sus genes y su entorno, también juegan un papel importante. Por lo tanto, las escuelas deben enfocarse en desarrollar estas habilidades emocionales y comportamentales además del aprendizaje tradicional.

Los genes influyen cada vez más en habilidades no cognitivas, como la motivación y la perseverancia. Al finalizar la educación obligatoria, estos efectos genéticos en habilidades no cognitivas predicen el éxito académico tanto como las capacidades cognitivas. Esto indica que tanto la genética como el entorno moldean la educación de un niño.

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El estudio subraya la relevancia del entorno. Los investigadores compararon a hermanos para diferenciar los efectos del ambiente familiar de los genéticos. Los resultados muestran que las influencias familiares son significativas, pero los niños también afectan su aprendizaje según su personalidad y habilidades.

Estos resultados son cruciales para la educación. Si las escuelas comprenden el valor de habilidades como la perseverancia y las capacidades sociales, pueden desarrollar programas específicos para fomentar el crecimiento de los estudiantes en estos aspectos. Por ejemplo, actividades diseñadas para aumentar la determinación y el interés en la escuela podrían mejorar significativamente el rendimiento estudiantil.

Las escuelas que se enfocan solamente en las habilidades cognitivas pueden pasar por alto las importantes partes emocionales y conductuales necesarias para un buen desempeño académico. Un enfoque más equilibrado que desarrolle tanto las habilidades cognitivas como las emocionales puede crear un entorno de aprendizaje más eficaz y enriquecedor.

Esta investigación facilita futuros estudios al analizar la conexión entre genes, ambiente y educación. Un mejor entendimiento de estos aspectos puede ayudar a maestros y legisladores a diseñar estrategias más efectivas para fomentar el desarrollo estudiantil y mejorar el desempeño escolar.

Investigadores de varias instituciones en seis países colaboraron en este estudio. La investigación fue financiada por el Consejo de Investigación Médica (MRC) de UK Research and Innovation (UKRI).