Reformular subsidios de uso del suelo: hacia un futuro neutro en carbono 2050
MadridEl Reino Unido está modificando su estrategia de subsidios de uso del suelo para alinearse mejor con sus objetivos ambientales, como alcanzar el objetivo de Cero Emisiones Netas para 2050. El programa actual ofrece pagos fijos a los propietarios de tierras para convertir tierras agrícolas en bosques, pero se considera ineficiente. Expertos de la Escuela de Negocios de la Universidad de Exeter indican que estos pagos no siempre resultan en plantaciones en áreas que efectivamente reducen los gases de efecto invernadero. En ocasiones, fomentan plantaciones en suelos ricos en carbono, lo que podría aumentar las emisiones.
Un enfoque basado en el "Capital Natural" es recomendado por expertos para mejorar la asignación de subsidios. Este método prioriza aquellos subsidios que probablemente ofrecerán mayores beneficios ambientales. Su objetivo es reforzar los esfuerzos contra el cambio climático, aumentar la biodiversidad y mejorar los espacios recreativos. A continuación, se destacan las principales diferencias en la distribución de los subsidios.
- Subvenciones a tarifa plana: Ofrecen pagos uniformes sin considerar la idoneidad del terreno, lo que a menudo conduce a resultados ambientales desfavorables.
- Escenarios de Uso de Tierra: Fomentan la plantación masiva de árboles, aunque conlleva un mayor costo financiero.
- Enfoque de Capital Natural: Se enfoca en áreas con alto valor ambiental, proporcionando mejores retornos para la inversión pública.
El plan de Capital Natural integra ciencia y economía, siguiendo las ideas del Plan Ambiental de 25 años del Reino Unido. Un beneficio clave es la creación de nuevos bosques cerca de las ciudades, facilitando que las personas disfruten de la naturaleza y aumentando la presencia de vida silvestre en las áreas urbanas. Además, este plan ayuda a los habitantes de la ciudad a enfrentar el calor, ofreciendo espacios verdes y sombreados que refrescan las zonas urbanas.
El Reino Unido puede obtener numerosos beneficios al modificar la forma en que se otorgan las subvenciones. Al aplicar métodos científicos, el país podría avanzar en la reducción de emisiones de carbono, restaurar hábitats naturales y crear mejores espacios públicos. Siguiendo prácticas globales, el Reino Unido podría liderar la creación de políticas de uso del suelo más inteligentes.
El profesor Ian Bateman y su equipo proponen que modificar el sistema de subsidios puede mejorar el medio ambiente, la economía y la sociedad. Al incentivar el almacenamiento de carbono en los lugares más adecuados, tanto la naturaleza como la economía pueden salir ganando. Este enfoque podría también influir en la gestión del suelo en otros países, alentándolos a adoptar modelos de financiamiento específicos que aborden el cambio climático, protejan la biodiversidad y garanticen la seguridad alimentaria.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1073/pnas.2407961121y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Ian J. Bateman, Amy Binner, Ethan T. Addicott, Ben Balmford, Frankie H. T. Cho, Gretchen C. Daily, Anthony De-Gol, Sabrina Eisenbarth, Michela Faccioli, Henry Ferguson-Gow, Silvia Ferrini, Carlo Fezzi, Kate Gannon, Ben Groom, Anna B. Harper, Amii Harwood, Jon Hillier, Mark F. Hulme, Christopher F. Lee, Lorena Liuzzo, Andrew Lovett, Mattia C. Mancini, Robert Matthews, James I. L. Morison, Nathan Owen, Richard G. Pearson, Stephen Polasky, Gavin Siriwardena, Pete Smith, Pat Pat Snowdon, Peter Tippett, Sylvia H. Vetter, Shailaja Vinjili, Christian A. Vossler, Robert T. Watson, Daniel Williamson, Brett H. Day. How to make land use policy decisions: Integrating science and economics to deliver connected climate, biodiversity, and food objectives. Proceedings of the National Academy of Sciences, 2024; 121 (49) DOI: 10.1073/pnas.2407961121Compartir este artículo