Un estilo de vida saludable supera la genética para prevenir la diabetes tipo 2

MadridInvestigadores de la Universidad de Finlandia Oriental han descubierto métodos innovadores para prevenir la diabetes tipo 2, incluso en personas con un alto riesgo genético. A diferencia de estudios anteriores, este revela que seguir una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente puede reducir el riesgo de diabetes tipo 2 sin importar la predisposición genética. El estudio, llamado Ensayo T2D-GENE, siguió a casi 1,000 hombres de entre 50 y 75 años durante un período de tres años.

Este estudio es de gran relevancia ya que la diabetes tipo 2 es muy común en todo el mundo. La Federación Internacional de Diabetes informa que uno de cada once adultos padece diabetes, y el 90% de estos casos son de tipo 2. Los investigadores han identificado más de 500 variantes genéticas relacionadas con esta enfermedad. No obstante, este estudio demuestra que las elecciones de estilo de vida pueden ayudar a reducir los riesgos asociados con estos factores genéticos.

Los participantes en el estudio fueron divididos en dos grupos:

• Un grupo de intervención de estilo de vida compuesto por más de 600 hombres que recibieron orientación sobre hábitos saludables.
• Un grupo de control, que no recibió ninguna orientación sobre el estilo de vida.

Los hombres del grupo de intervención lograron mejoras notables en su alimentación. Aumentaron su consumo de fibra dietética, mejoraron el tipo de grasas ingeridas e incrementaron la ingesta de vegetales, frutas y bayas. Estos cambios en su dieta resultaron en una cierta pérdida de peso, a pesar de que perder peso no era el objetivo principal del estudio. Los participantes, ya físicamente activos, mantuvieron su nivel de ejercicio a lo largo del estudio.

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Los resultados son muy alentadores. El número de personas con diabetes tipo 2 fue mucho menor en el grupo que modificó su estilo de vida comparado con el grupo de control. Lo emocionante es que los beneficios de un estilo de vida saludable fueron iguales tanto para personas con alto riesgo genético como para aquellas con bajo riesgo genético. Este estudio fue el primero en demostrar que los cambios en el estilo de vida pueden reducir el impacto del riesgo genético.

Los hallazgos de este estudio benefician a más personas que solo a los participantes. Dado que la diabetes tipo 2 es cada vez más común en todo el mundo, estos resultados sugieren una forma más económica para que los servicios de salud la gestionen. Utilizar reuniones grupales y consejos de estilo de vida en línea, como se hizo en este estudio, puede reducir los costos de atención médica y ayudar a las personas a llevar una vida más saludable.

Este estudio demuestra que los cambios en el estilo de vida pueden prevenir la diabetes tipo 2. Hace un llamado a las políticas de salud para que apoyen mejores dietas y una mayor actividad física. Para las personas, resalta la importancia de adoptar y mantener hábitos saludables, incluso si tienen una predisposición genética a la diabetes tipo 2.