Descubren la clave molecular de la EM y enfermedades autoinmunes: PRDM1-s y el impacto de la sal
MadridUn estudio reciente publicado en Science Translational Medicine por investigadores de Yale ha identificado una razón clave por la cual las células T reguladoras (Tregs) no funcionan adecuadamente en enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple (EM). Descubrieron que una proteína llamada PRDM1-S, o BLIMP-1, es mucho más común en personas con EM que en aquellas sin la enfermedad.
David Hafler y su equipo en Harvard descubrieron que las células T reguladoras son cruciales para mantener el sistema inmunológico bajo control al evitar reacciones exageradas. Cuando estas células no funcionan correctamente, pueden provocar enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple. Hasta ahora, se desconocía la razón exacta de este mal funcionamiento.
El nuevo estudio dirigido por Yale encontró una relación entre PRDM1-S y la enzima SGK-1, que es sensible a la sal. Así funciona el proceso:
- Altos niveles de sal aumentan la expresión de PRDM1-S.
- PRDM1-S, a su vez, incrementa la producción de SGK-1.
- Los niveles elevados de SGK-1 alteran la función de las células T reguladoras.
El consumo elevado de sal, además de ser perjudicial para la salud del corazón, ahora se relaciona con el empeoramiento de enfermedades autoinmunes. Esto ocurre al interferir con la función reguladora de ciertas células inmunitarias llamadas Tregs, que normalmente ayudan a controlar el sistema inmunológico. Esto demuestra cómo factores ambientales, como la dieta, pueden interactuar con predisposiciones genéticas para desencadenar enfermedades autoinmunes.
Este hallazgo es crucial, ya que demuestra cómo la alimentación puede ayudar a manejar y prevenir enfermedades autoinmunes. Las dietas altas en sal, comunes en los países occidentales, no solo pueden causar hipertensión, sino también aumentar la probabilidad de desarrollar enfermedades autoinmunes al afectar la función de las Treg.
El equipo de investigación está desarrollando fármacos para reducir los niveles de PRDM1-S, lo cual podría restaurar el funcionamiento adecuado de las células T reguladoras. Este enfoque podría convertirse en un tratamiento universal para diversas enfermedades autoinmunes, no solo para la esclerosis múltiple.
Este nuevo conocimiento permite una atención médica más personalizada. Si los médicos saben que una alta ingesta de sal está empeorando la condición de un paciente, pueden ofrecer consejos específicos sobre cambios en la dieta y el estilo de vida, además de cualquier medicación necesaria.
Investigadores del Broad Institute y otras instituciones colaboraron para fortalecer estos hallazgos. Utilizaron nuevos métodos computacionales para mejorar la función de las Treg, lo que podría llevar a tratamientos innovadores para enfermedades autoinmunes que solucionen la raíz del problema en lugar de solo tratar los síntomas.
El vínculo entre PRDM1-S y SGK-1 revela una nueva forma de entender y tratar las enfermedades autoinmunes. Este descubrimiento resalta la importancia de los genes y el estilo de vida en la salud, abriendo camino a tratamientos más específicos y novedosos.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1126/scitranslmed.adp1720y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Tomokazu S. Sumida, Matthew R. Lincoln, Liang He, Yongjin Park, Mineto Ota, Akiko Oguchi, Raku Son, Alice Yi, Helen A. Stillwell, Greta A. Leissa, Keishi Fujio, Yasuhiro Murakawa, Alexander M. Kulminski, Charles B. Epstein, Bradley E. Bernstein, Manolis Kellis, David A. Hafler. An autoimmune transcriptional circuit drives FOXP3 + regulatory T cell dysfunction. Science Translational Medicine, 2024; 16 (762) DOI: 10.1126/scitranslmed.adp1720Compartir este artículo