Protestas y caos tras el arresto de Imran Khan: seis muertos
MadridPartidarios de Imran Khan están enfrentándose con la policía en Pakistán, haciendo que la situación sea tensa. Los enfrentamientos recientes han causado al menos seis muertes, demostrando lo peligrosa que se ha vuelto la situación. Estos disturbios comenzaron después de que Khan fuera encarcelado. Fue destituido del poder en 2022 y ahora enfrenta varios cargos de corrupción.
En Islamabad, Bushra Bibi, la esposa de Khan, se ha convertido en una figura central, liderando a sus seguidores hacia zonas gubernamentales clave. Está al frente del movimiento, promoviendo protestas pacíficas y alentando a continuar apoyando a su esposo. Aunque pide la no violencia, la situación sigue siendo tensa.
El gobierno está tomando medidas enérgicas para detener las protestas.
Protestas generan caos en la capital: Las carreteras están bloqueadas con contenedores de carga. Los servicios móviles e internet sufren interrupciones. Más de 4,000 manifestantes han sido arrestados. Las instituciones educativas permanecen cerradas. Se prohíben las manifestaciones en la capital.
El Ministro del Interior, Mohsin Naqvi, ha autorizado a la policía a actuar como sea necesario y ha insinuado que podrían utilizarse medidas enérgicas en caso de provocación. Esto refleja la decisión del gobierno de detener la protesta y restablecer el orden. El bloqueo de plataformas de redes sociales, cruciales para la organización de la manifestación, muestra los esfuerzos por interrumpir la comunicación del movimiento.
El arresto de Khan es un motivo clave para los disturbios, ya que sus seguidores lo ven como un blanco de maniobras políticas. Las protestas en curso demuestran que las personas tienen serias dudas sobre la legitimidad del gobierno. El papel destacado de Bibi en liderar el movimiento muestra una fuerte dedicación a los objetivos políticos de Khan, indicando que las protestas continuarán a menos que ocurran cambios significativos.
La visita del presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, a Islamabad complica aún más la situación. Esta muestra que otros países tienen interés en la estabilidad de Pakistán y que podrían surgir problemas diplomáticos si el desorden persiste. A medida que aumentan las tensiones, la situación política y estratégica de Islamabad se mantiene en riesgo de sufrir más disturbios.
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