Rastrear restos de ballenas: revelar ventajas ecológicas de la eliminación sostenible
MadridInvestigadores del Programa de Investigación sobre Ballenas y Clima de la Universidad de Griffith están buscando métodos ecológicos para manejar los cadáveres de ballenas. El Dr. Olaf Meynecke dirigió un estudio sobre una ballena jorobada hembra de 14 metros que probablemente murió tras ser golpeada por un barco. Encontrada en julio de 2023 cerca de Noosa Heads en Queensland, la ballena fue equipada con un dispositivo satelital y trasladada 30 kilómetros mar adentro. Los científicos la monitorearon durante seis días hasta que se hundió en el fondo del mar, proporcionando información valiosa.
Eliminar los cadáveres de ballenas ha sido complicado, especialmente con el aumento de varamientos en las playas australianas. El estudio se centró en desarrollar un método para predecir a dónde derivarán los cadáveres de ballenas. Esto podría ayudar a las autoridades a planificar métodos de remoción seguros y eficientes, respetando las prácticas culturales.
Aquí te mostramos algunas formas comunes en las que Australia se deshace de los cadáveres de ballenas:
- Vertedero: El método más común.
- Planta de Renderización: Para la creación de subproductos.
- Compostaje: Descomposición natural de los restos.
- Entierro en la Playa: Para descomposición local.
- Decomposición Natural en la Playa: Dejado para decaer naturalmente.
- Hundimiento en el Mar: Remolque de restos mar adentro.
- Descomposición Explosiva: Uso de explosivos para desmantelar restos.
Cada método presenta inconvenientes. Algunos son costosos y peligrosos para la salud pública. El estudio analizó el hundimiento de objetos en el mar como solución para mitigar estos problemas. El Dr. Meynecke explicó que los objetos a la deriva pueden obstruir rutas marítimas y, en ocasiones, regresar a la costa, generando inconvenientes. La nueva herramienta del estudio busca predecir con precisión las trayectorias de deriva.
Los cadáveres de ballenas benefician a la vida marina al proporcionar nutrientes esenciales. Según el Dr. Meynecke, cuando las ballenas se descomponen, liberan nutrientes que favorecen el ecosistema oceánico. Animales como los tiburones tigre ayudan a descomponer estos restos rápidamente, mejorando el flujo de nutrientes y apoyando a diversas especies marinas. Este proceso también contribuye a la eliminación de carbono y enriquece el fondo marino por muchos años.
Colocar los restos de ballenas en el océano puede favorecer el sustento de la vida marina de las profundidades y a los microorganismos. Meynecke subrayó la importancia de evaluar cada situación de manera individual al decidir los métodos de eliminación. El estudio reveló que deshacerse de los restos de ballenas en alta mar podría ser una opción económica y segura si se realiza correctamente.
Combinar la investigación científica con estrategias de gestión prácticas puede mejorar la forma en que manejamos los restos de ballenas. El estudio de Meynecke muestra que una planificación cuidadosa y previsiones avanzadas pueden aumentar los beneficios ecológicos y reducir los efectos negativos. La investigación, titulada “¿Muertas en la playa? Predecir la deriva de restos de ballenas mejora la gestión para su disposición en alta mar,” ha sido publicada en el Journal of Marine Science and Engineering. Este estudio subraya la necesidad de nuevas soluciones en la conservación marina.
El estudio permite una mejor gestión de los varamientos de ballenas. Al predecir con precisión hacia dónde se desplazarán, beneficia tanto a la vida marina como a la seguridad pública. Las ventajas son evidentes: un método científico que recicla nutrientes, favorece a los ecosistemas marinos y mantiene las playas limpias.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.3390/jmse12071156y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Jan-Olaf Meynecke, Sasha Zigic, Larissa Perez, Ryan J. K. Dunn, Nathan Benfer, Johan Gustafson, Simone Bosshard. Dead on the Beach? Predicting the Drift of Whale Remains Improves Management for Offshore Disposal. Journal of Marine Science and Engineering, 2024; 12 (7): 1156 DOI: 10.3390/jmse12071156Compartir este artículo