Descubren recetas milenarias de focaccia: tradiciones culinarias del Neolítico en el Cercano Oriente

MadridInvestigadores han descubierto evidencia arqueológica importante que indica que durante el Neolítico tardío existía una tradición culinaria avanzada, particularmente en la elaboración de grandes panes y focaccias saborizados. Expertos de diversas universidades condujeron el estudio que revela cómo las comunidades completamente agrícolas del área del Creciente Fértil en el Cercano Oriente participaron en estas actividades de horneado grupal. El hallazgo se centra principalmente en las bandejas de desgranado, unos recipientes especiales para hornear hallados en varios sitios arqueológicos.

Los resultados del estudio destacan algunos puntos clave:

Las bandejas estaban hechas de arcilla tosca y tenían superficies internas únicas con ranuras que facilitaban la extracción del pan. Los panes horneados en estas bandejas pesaban alrededor de 3 kg, lo que sugiere que estaban destinados para el consumo compartido. Cereales como el trigo y la cebada se transformaban en harina para elaborar estos panes. Algunos panes contenían grasas animales y condimentos de origen vegetal, lo que indica una variedad de perfiles de sabor.

Este descubrimiento nos ayuda a comprender qué alimentos preferían las personas en el Neolítico y cómo interactuaban socialmente. La elaboración de pan era fundamental en sus ceremonias y reuniones, ya que los grandes panes probablemente estaban destinados a ser compartidos. Experimentaban con diferentes sabores e ingredientes, demostrando habilidades culinarias tempranas y compartiendo ideas con otros, utilizando los recursos a su alrededor.

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La investigación abarca una gran área entre lo que hoy conocemos como Siria y Turquía, demostrando que esta tradición era común en muchos lugares. Resalta cómo la panificación comunitaria ayudó a unir a las personas y a compartir ideas, lo que podría haber influido en las prácticas actuales de panadería que involucran reuniones grupales y el compartir alimentos.

El hallazgo de residuos orgánicos revela que las personas empleaban tanto grasas animales como condimentos vegetales en su alimentación, lo que indica que su dieta incluía tanto plantas como animales. Esto sugiere que ya comprendían la importancia de una dieta equilibrada para obtener diferentes nutrientes, aún antes de la existencia de la ciencia nutricional moderna.

Los descubrimientos indican que los primeros humanos poseían avanzadas habilidades para hornear. En la era Neolítica, utilizaban hornos en forma de cúpula y eran capaces de controlar las temperaturas, lo que demuestra que tenían un conocimiento profundo sobre la cocina. Esto es notable para esa época y probablemente influyó en los métodos culinarios futuros.

Esta investigación nos ofrece una visión sobre la historia de la focaccia y otros panes similares, y nos ayuda a comprender cómo las comunidades agrícolas antiguas se desarrollaron social y tecnológicamente.