Compartir cama con padres fortalece el desarrollo psicológico de los niños, según estudio reciente
MadridUn estudio reciente de la Universidad de Essex reveló que el compartir la cama con los padres es seguro para la salud psicológica de los niños. La investigación, que analizó a alrededor de 17,000 niños británicos durante 11 años, demostró que los pequeños que compartían la cama eran felices y saludables, a pesar de las preocupaciones previas.
Este estudio es relevante para los padres de hoy en día. Antes, algunos expertos pensaban que permitir que un bebé durmiera en la misma cama podría limitar su crecimiento emocional o volverlo demasiado dependiente. Sin embargo, la investigación sugiere que esto no es cierto. Se analizaron bebés que compartían la cama a los 9 meses y se observó su desarrollo emocional y conductual hasta los 11 años.
Puntos clave del estudio:
- Compartir la cama a los 9 meses no tiene impacto negativo en el desarrollo emocional o conductual.
- Los niños que comparten la cama son tan felices y saludables como aquellos que no lo hacen.
- Las preocupaciones de los padres sobre compartir la cama podrían ser infundadas si se hace de manera segura.
- El estudio se basa en datos del Millennium Cohort Study del Reino Unido, que incluyó a 16,599 niños.
Muchos padres consideran que compartir la cama facilita el cuidado de sus hijos durante la noche, especialmente para alimentarlos o consolarlos. Esto puede mejorar el descanso tanto de los padres como de los niños, lo cual podría reducir el estrés en el hogar. Manejar el estrés en la crianza temprana es crucial para el bienestar de ambos.
Compartir la cama puede ayudar a los niños a sentirse más seguros y a reducir su ansiedad. Tener a los padres cerca les proporciona una sensación de seguridad, lo que en realidad puede hacerlos más independientes a medida que crecen, contrariamente a lo que algunos podrían pensar.
Un estudio sugiere que reconsideremos cómo la sociedad influye en las decisiones de crianza. Las opiniones negativas sobre el colecho, basadas en percepciones culturales y anecdóticas, pueden causar culpa o vergüenza innecesarias en los padres. La investigación del equipo de la Dra. Ayten Bilgin proporciona evidencia científica para aliviar estas preocupaciones, animando a los padres a elegir lo que mejor funcione para su familia sin temer efectos psicológicos a largo plazo en sus hijos.
Este estudio revela que compartir la cama con un bebé de forma segura es una opción razonable para los padres y no perjudica las emociones ni el comportamiento del niño. Este hallazgo podría ayudar a que las personas sean más receptivas a distintos métodos de crianza basados en hechos y no en miedos.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1080/14616734.2024.2380427y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Ayten Bilgin, Isabel Morales-Muñoz, Catherine Winsper, Dieter Wolke. Associations between bed-sharing in infancy and childhood internalizing and externalizing symptoms. Attachment & Human Development, 2024; 1 DOI: 10.1080/14616734.2024.2380427Compartir este artículo