Enfoques integrales para la salud mental: más allá de la mente

MadridLos profesionales de la salud frecuentemente recurren a medicamentos para tratar afecciones mentales. Sin embargo, este enfoque pasa por alto la influencia del entorno, el estilo de vida y los factores sociales. Los expertos Sidarta Ribeiro, Ana Paula Pimentel, Paulo Amarante y su equipo proponen una metodología más integral en la nueva revista PLOS Mental Health.

Los problemas de salud mental están en aumento, especialmente entre niños y jóvenes adultos. Según la Organización Mundial de la Salud, estas afecciones afectan al menos a una de cada ocho personas en todo el mundo. Aunque los medicamentos han mejorado, algunos opinan que la psiquiatría depende demasiado de los fármacos.

Ribeiro y su equipo sugieren el uso de medicamentos junto con una comprensión profunda de todos los factores que influyen en la salud mental. Un enfoque integral para la salud mental incluye:

• Derechos individuales y dignidad
• Modelos de apoyo entre pares
• Fortalecimiento comunitario
• Cambios en el estilo de vida (sueño, nutrición, ejercicio)
• Participación en diálogos internos (psicoterapia, arteterapia, exposición a la naturaleza)

Para atender a una persona en crisis mental, primero hay que reconocer sus derechos y dignidad. El apoyo de pares y las conexiones fuertes en la comunidad pueden contribuir significativamente a su recuperación.

Lea también:

Ayer · 18:18

El asombroso regreso de los elefantes marinos

Mejorar tu estilo de vida es fundamental. Dormir bien, comer alimentos nutritivos y hacer más ejercicio pueden ayudar mucho. Incluir actividades como el yoga y la Capoeira en tu rutina también puede ser beneficioso.

Hablar contigo mismo también es fundamental. Métodos terapéuticos como la psicoterapia, la terapia artística y pasar tiempo en la naturaleza pueden contribuir significativamente a mejorar la salud mental.

Los expertos afirman que la salud mental no solo se ve influenciada por la biología. También depende de nuestras situaciones sociales, entorno y experiencias de vida en general.

Los autores afirman que problemas de sueño, nutrición, ejercicio y reflexión personal son consecuencia de nuestro estilo de vida. Proponen un enfoque más natural para la salud mental que fortalece nuestra conexión con el cuerpo, la naturaleza y la comunidad.