Impulsan mejor atención nutricional para enfermos y ancianos, urgen investigadores
MadridHasta la mitad de los pacientes en hospitales y centros de salud no reciben una nutrición adecuada. Esto puede causar dolor, disminuir su calidad de vida e incluso conducir a la muerte. Investigadores de la Universidad de Uppsala y la Universidad de Gotemburgo han abordado estos problemas en un artículo de revisión en el New England Journal of Medicine. Ellos destacan que proporcionar nutrientes esenciales puede solucionar muchos de estos problemas, pero a menudo esto se pasa por alto.
Puntos Clave:
- La infradiagnosis y el tratamiento inadecuado de la desnutrición son preocupaciones importantes.
- Entre el 5 y el 10% de los adultos mayores en Suecia están desnutridos, cifra que aumenta al 50% en hospitales y centros de atención.
- A menudo se considera erróneamente que la desnutrición es una parte natural del envejecimiento o de las enfermedades.
- La falta de nutrientes puede provocar atrofia muscular y una mayor vulnerabilidad a infecciones.
El profesor Tommy Cederholm de la Universidad de Uppsala afirma que no se diagnostica a suficientes pacientes con desnutrición. Considera que métodos sencillos pueden mejorar las condiciones de muchos enfermos. Cederholm e Ingvar Bosaeus, consultor del Hospital Universitario Sahlgrenska, han escrito un artículo resumen que recopila el conocimiento global sobre este tema de los últimos 50 años. Subrayan la importancia de utilizar investigaciones actuales para mejorar las prácticas sanitarias.
La desnutrición ocurre cuando una enfermedad reduce el apetito, lo que provoca pérdida de peso y daña órganos y tejidos. Las personas desnutridas suelen perder masa muscular, dificultando las tareas cotidianas. Además, tienen un mayor riesgo de infecciones y requieren más atención médica, resultando en estancias hospitalarias más prolongadas y más probabilidades de fallecimiento.
Estudios recientes indican que la malnutrición se puede mejorar. Colaborar con dietistas y consumir bebidas nutricionales puede prevenir la pérdida de peso y reducir el riesgo de mortalidad. Aunque estas medidas son sencillas de implementar, a menudo se pasan por alto.
Cederholm y Bosaeus proponen las siguientes medidas proactivas para disminuir la desnutrición:
- Registrar tempranamente los factores de riesgo de desnutrición.
- Estar atentos a la pérdida de peso y de apetito.
- Recomendar alimentos ricos en nutrientes desde las primeras etapas.
- Iniciar la terapia nutricional de manera oportuna.
Afirman que es fundamental enseñar esta información de manera clara a doctores y enfermeras, tanto en su formación básica como avanzada.
La desnutrición es un problema común entre los enfermos y ancianos que a menudo se pasa por alto. La forma en que se manejan actualmente la atención médica y el cuidado de ancianos no resuelve bien este problema. Soluciones sencillas como dar consejos nutricionales y ofrecer bebidas nutritivas pueden marcar una gran diferencia en la recuperación de los pacientes. Es fundamental que los trabajadores de la salud integren estas acciones en la atención habitual.
Investigadores han desarrollado medidas que se pueden implementar de manera fácil y rápida. Los sistemas de salud en todo el mundo deben aplicar estos métodos para reducir el sufrimiento y mejorar la calidad de vida de muchas personas. Este cambio puede mejorar la atención al paciente y ayudar a los hospitales al reducir las estancias prolongadas y disminuir las tasas de infección.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1056/NEJMra2212159y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Tommy Cederholm, Ingvar Bosaeus. Malnutrition in Adults. New England Journal of Medicine, 2024; 391 (2): 155 DOI: 10.1056/NEJMra2212159Compartir este artículo