El sector manufacturero de China disminuye, señales de malestar económico

Los indicadores económicos muestran una caída según el WSJ.

En agosto, la actividad manufacturera de China disminuyó por cuarto mes consecutivo, reflejando una debilidad persistente en la economía del país. La Oficina Nacional de Estadísticas informó que el Índice de Gerentes de Compras (PMI) bajó a 49.1 desde 49.4 en julio. Un PMI por debajo de 50 indica que el sector está en contracción.

Varios factores contribuyeron a esta disminución:

• Altas temperaturas y fuertes lluvias
• La temporada baja para algunas industrias
• Débil demanda interna
• Persistentes presiones desinflacionarias

Los expertos no se sorprendieron con los datos. Informes recientes ya habían mostrado un crecimiento lento. La falta de apoyo significativo del gobierno también contribuyó a la caída. Un problema inmobiliario de tres años sigue siendo una gran preocupación. La inversión en propiedades continúa disminuyendo y las ventas de viviendas no mejoran.

Los economistas de UBS han reducido sus expectativas de crecimiento económico para China. Ahora pronostican que el PIB aumentará un 4.6% este año y un 4.0% el próximo año, una disminución con respecto a las estimaciones anteriores de 4.9% y 4.6%. Creen que los problemas en el mercado inmobiliario afectarán el gasto de los hogares y a la economía en general.

Los números financieros revelan problemas más graves.

Los datos fiscales de China ofrecen otra perspectiva sobre su economía. Las cifras más recientes muestran una disminución generalizada en los ingresos fiscales. Los economistas de Barclays consideran que esto indica problemas más graves de lo que sugieren las estadísticas oficiales de crecimiento.

Puntos clave señalados por Barclays:

• Los ingresos por el impuesto sobre la renta corporativa cayeron un 5,4% en los primeros siete meses del año.
• Los resultados del primer semestre de las empresas cotizadas muestran un mayor deterioro en los márgenes corporativos.
• Las guerras de precios y los recortes de precios se están volviendo más comunes, agravando los problemas de sobrecapacidad.

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La disminución de las ganancias frecuentemente conlleva recortes salariales y despidos, lo que reduce el gasto. El mercado laboral está bajo presión, evidenciado por una baja en los ingresos por impuestos sobre la renta. Aunque este impuesto afecta solo al 13% de la fuerza laboral de China, la caída indica una situación laboral en deterioro para los trabajadores de mayores ingresos.

El índice PMI de agosto muestra que algunas áreas clave empeoran. El subíndice de producción bajó a 49.8 desde 50.1 en julio. Los nuevos pedidos cayeron a 48.9 desde 49.3, y el empleo disminuyó a 48.1 desde 48.3. El subíndice de nuevos pedidos de exportación se mantuvo por debajo de 50 durante cuatro meses, situándose en 48.7.

Preocupaciones y Soluciones Posibles

El sector de alta tecnología y la fabricación de equipos en China crecieron nuevamente gracias a los esfuerzos de Pekín por impulsar la manufactura avanzada. Sin embargo, las industrias de alto consumo energético vieron una disminución en su rendimiento, pasando de 48.6 a 46.4, lo que afectó negativamente al índice general.

Existen crecientes preocupaciones sobre el exceso de capacidad en los sectores industriales tradicionales. Recientemente, Beijing ha dejado de aprobar nuevas plantas de acero para controlar el excedente de producción. Los productores de acero chinos están intentando solucionar este problema aumentando las exportaciones, lo que está causando conflictos comerciales.

Los economistas empiezan a dudar del plan de Pekín. Yan Wang, un experto en China de Alpine Macro, afirmó que a los líderes chinos les falta una estrategia clara. Él cree que su enfoque podría causar problemas económicos a largo plazo, similares a los que enfrentó Japón a principios de la década de 1990.

Wang opina que Pekín debería implementar un sólido apoyo económico y alivio de la deuda para los gobiernos locales. Además, considera que si China demuestra un compromiso real con las reformas centradas en el mercado, podría generar mayor confianza.

El PMI no manufacturero de China subió ligeramente a 50.3 en agosto desde 50.2 en julio. Este indicador, que abarca tanto las actividades de servicios como las de construcción, muestra un pequeño cambio positivo en una situación económica desafiante. No obstante, podrían ser necesarias medidas más amplias para mejorar la economía.