Nueva señal intestinal frena la quema de grasa durante el ayuno, revela estudio

MadridInvestigadores del Instituto de Investigación Scripps han descubierto una nueva forma en que se controla la quema de grasa durante el ayuno. Han hallado que una pequeña molécula producida en los intestinos de los gusanos C. elegans es crucial. Esta molécula, un tipo de insulina llamada INS-7, se dirige al cerebro e inhibe una hormona quemadora de grasa denominada FLP-7, lo que a su vez desacelera el metabolismo de las grasas cuando no se ingiere alimento.

El estudio describe la comunicación entre el intestino y el cerebro, demostrando que no se trata solo de calorías. Entre los descubrimientos sobresalientes de la investigación se encuentran:

• La INS-7 es producida por las células intestinales durante el ayuno y bloquea los receptores de insulina en el cerebro, lo cual es contrario a las moléculas de insulina previamente descubiertas que activan estos receptores.
• Este bloqueo del receptor de insulina desencadena una reacción en cadena que finalmente detiene la producción de la hormona quema-grasas FLP-7 en las células cerebrales.
• El hallazgo sugiere que el intestino envía señales al cerebro para conservar las reservas de grasa cuando hay falta de ingesta de alimentos.

Esta investigación puede ser significativa tanto para los humanos como para otros mamíferos. La insulina normalmente regula el azúcar en la sangre, pero ahora sabemos que también participa en el metabolismo de las grasas. Esta nueva información puede ayudarnos a desarrollar tratamientos para afecciones como la obesidad y el síndrome metabólico, especialmente si los humanos tienen moléculas de insulina similares en el intestino.

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Comprender cómo el intestino y el cerebro colaboran para controlar el metabolismo de las grasas podría mejorar la gestión del peso. Medicamentos que imitan a las hormonas intestinales, como semaglutida, ya han tenido éxito en el tratamiento de la obesidad y la diabetes. Descubrir nuevos péptidos intestinales podría dar lugar a más fármacos en esta categoría, posiblemente con menos efectos secundarios.

El hallazgo de que el cerebro detiene la descomposición de grasas mediante una señal del intestino durante el ayuno podría ayudar a explicar algunos de sus beneficios para la salud. Esto sugiere que el ayuno activa respuestas biológicas complejas más allá de simplemente reducir la ingesta calórica. Los científicos podrían descubrir que se pueden ajustar diferentes horarios de ayuno para obtener el máximo beneficio para la salud.

Investigadores financiados por los Institutos Nacionales de Salud están estudiando cómo las células intestinales detectan el ayuno y producen una molécula llamada INS-7. También tienen previsto buscar señales similares en mamíferos, lo que podría llevar a nuevos tratamientos para gestionar el metabolismo. Esta investigación destaca la importancia de la comunicación entre el intestino y el cerebro en nuestra salud metabólica.