La postura de Harris sobre el fracking vuelve en una batalla clave de Pensilvania

MadridEn Pensilvania, el fracking es crucial. Kamala Harris habló en su momento de prohibirlo, y ahora Donald Trump lo menciona nuevamente. Trump quiere que los votantes de Pensilvania recuerden la postura anterior de Harris sobre el fracking. Harris había apoyado el “Green New Deal”. Trump afirmó que esto perjudicaría a las industrias del petróleo, carbón y gas.

El equipo de Harris afirmó que no tienen intención de prohibir el fracking y acusó a Trump de intentar distraer a los votantes. Trump sigue promoviendo más perforaciones de petróleo. Las opiniones antiguas dentro del Partido Demócrata sobre el fracking generan cierto conflicto. Los republicanos buscan aprovechar este conflicto para debilitar la unidad de los demócratas entre sus partidarios que se preocupan por el medio ambiente y aquellos que trabajan en empleos laborales.

Puntos Clave:

• Estrategia de Trump: Destacar la oposición pasada de Harris al fracking.
• Respuesta demócrata: Negar cualquier plan actual para prohibir el fracking.
• Tensión en política energética: Las alianzas demócratas se ven afectadas por el tema del fracking.
• Pensilvania: Campo de batalla crucial en los debates sobre política energética.

El fracking, o fracturación hidráulica, es un tema controversial en Pensilvania. La economía del estado se beneficia de la extracción de gas natural. Sin embargo, muchos demócratas exigen regulaciones más estrictas. Esto ha convertido a Pensilvania en un punto clave del debate energético nacional. Los republicanos ven esto como una oportunidad para ganar apoyo. Criticaron a Joe Biden en 2020 y a John Fetterman en 2022 por estos temas.

La producción de gas natural y petróleo ha alcanzado niveles récord bajo la administración de Biden, a pesar de que algunos afirmaban que quería detener el fracking. Aunque Biden intentó frenar las concesiones en tierras federales, la producción de gas natural sigue en aumento. Harris ha apoyado la meta de Biden para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a cero neto para 2050, pero este plan nunca incluyó la prohibición del fracking.

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Existe incertidumbre sobre si Harris, en caso de postularse a la presidencia, seguiría las políticas de Biden. Las empresas energéticas son cautelosas, recordando la declaración de Hillary Clinton sobre el fin de los empleos en la minería del carbón. Los republicanos usan estos comentarios pasados para sembrar la duda y el miedo entre los trabajadores de Pensilvania que dependen de los empleos energéticos.

Demócratas como John Fetterman y Josh Shapiro apoyan regulaciones estrictas, pero no una prohibición del fracking. Esta estrategia les funciona, y parece que Harris sigue el mismo camino. El respaldo de los sindicatos es crucial. La Asociación de Plomeros y Firambreros Unidos ha respaldado a Harris, a pesar de que ella se ha manifestado en contra del fracking en el pasado.

Un leve cambio en las opiniones de los votantes en Pensilvania podría tener un gran impacto. Las victorias de Trump en 2016 y de Biden en 2020 demuestran la importancia de este estado. Los candidatos deben equilibrar las preocupaciones medioambientales con los empleos en el sector energético. Las opiniones de Harris sobre el fracking, tanto pasadas como presentes, serán observadas de cerca a medida que se acerque la elección.