Puente más largo de Perú sin uso por controversia ambiental y comunitaria
MadridEl puente más largo de Perú se encuentra en la selva amazónica y actualmente no lleva a ninguna parte. Forma parte del proyecto de la carretera Iquitos-El Estrecho, que es la obra vial más grande y costosa de la región. Sin embargo, el proyecto ha enfrentado una fuerte oposición de comunidades indígenas y grupos ambientalistas.
En Sucusari, una aldea cercana con alrededor de 180 habitantes, los residentes se sustentan con la pesca, la caza y el cultivo de frutas que venden localmente. Ahora están afrontando cambios que no solicitaron.
A continuación, una lista de las principales preocupaciones:
- Infiltración de drogas en las comunidades
- Incremento de la apropiación ilegal de tierras
- Deforestación en territorios indígenas
- Alteración de modos de vida tradicionales
La Sociedad Peruana de Derecho Ambiental, una organización sin fines de lucro, publicó un informe indicando que la carretera pasará por dos áreas protegidas, Maijuna Kichwa y Ampiyacu Apayacu. Estas áreas comprenden alrededor de 8,000 kilómetros cuadrados (3,000 millas cuadradas) de bosque antiguo.
El gobierno no ha mencionado reunirse con la comunidad ni ha propuesto planes para solucionar estos problemas. Los indígenas se sienten ignorados y exigen medidas antes de que la situación empeore.
Los habitantes del pueblo de Sucusari están preocupados por la posibilidad de perder su estilo de vida tradicional. Viven en casas con techos de paja y dependen de la pesca, la caza y el cultivo de frutas como el aguaje, una delicia de la Amazonía. Temen que una nueva carretera cambie sus vidas para siempre.
Los ecologistas advierten que la deforestación perjudica a la fauna. Afirman que cuando se termine la autopista, habrá más daños ambientales. Las áreas protegidas están en peligro y los animales podrían perder sus hogares.
Las personas que viven cerca del puente y la carretera están observando un aumento de invasiones y ocupaciones ilegales de terrenos. Los activistas creen que esto es por el proyecto de construcción.
Los residentes se sienten ignorados e impotentes. Desean que el gobierno colabore en proteger su tierra y su estilo de vida.
El proyecto de la carretera Iquitos-El Estrecho ha generado mucho debate. Las comunidades indígenas, ambientalistas y activistas están preocupados. Todos exigen que el gobierno resuelva estos problemas cruciales antes de avanzar con la construcción.
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