Avance en la creación del elemento 116 impulsa la búsqueda de átomos más pesados

MadridCientíficos del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley han avanzado en la creación del elemento 120. Lograron esto produciendo el elemento 116 mediante un innovador uso de un haz de titanio. Este es un paso crucial para encontrar elementos más pesados en la tabla periódica.

Elaboración de elementos superpesados: proceso complejo

La creación de elementos superpesados es sumamente complicada. Los investigadores básicamente colisionan elementos más ligeros, con la esperanza de que se combinen para formar un nuevo elemento más pesado. Aspectos clave a destacar:

• El elemento 116, conocido como livermorio, ha sido producido utilizando un haz de titanio.
• Este experimento requirió la síntesis de dos átomos durante 22 días.
• El siguiente objetivo es el elemento 120, cuya creación se predice que tomará diez veces más tiempo.

Este hallazgo revela que los haces de titanio pueden ser ahora utilizados para crear ciertos elementos, lo cual difiere del uso previamente favorecido de haces de calcio-48. El calcio-48 tiene una configuración ideal para la creación de elementos superpesados, a diferencia del titanio-50. Sin embargo, el éxito en el uso del titanio-50 abre ahora nuevas posibilidades para la investigación nuclear.

Si los científicos logran crear el elemento 120, se ubicaría en la octava fila de la tabla periódica. Esto es significativo porque está cerca de una zona predicha donde estos elementos pesados podrían tener una vida más larga antes de desintegrarse. Actualmente, los elementos superpesados se descomponen casi de inmediato, lo que dificulta su estudio.

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Una mejor comprensión de los elementos superpesados puede proporcionar información invaluable sobre la física nuclear, como:

• Comprender las propiedades de los núcleos atómicos en condiciones extremas.
• Poner a prueba y perfeccionar los modelos de física nuclear.
• Determinar los límites y el comportamiento de la materia.

La ingeniería detrás de este experimento es igualmente impresionante. El equipo utilizó un horno de inducción que mantenía una temperatura constante cerca de los 3000 grados Fahrenheit. Esta consistencia fue crucial para vaporizar continuamente titanio-50 y crear un haz de iones estable. Este haz impactaba un objetivo rotatorio más delgado que el papel a una velocidad de 6 billones de iones por segundo, cuidadosamente equilibrado para proporcionar la cantidad exacta de energía necesaria para la fusión exitosa.

Científicos intentarán crear el elemento 120 utilizando un blanco de californio-249. Este proceso involucrará una preparación meticulosa en el Ciclotrón de 88 pulgadas, incluyendo la producción de haces de alta potencia y la optimización de las condiciones del blanco. El intento podría comenzar en 2025, pero probablemente tomará varios años detectar siquiera unos pocos átomos del nuevo elemento.

Descubrir el elemento 120 podría abrir nuevas puertas para comprender cómo funcionan los átomos. Aunque todavía no sabemos cómo se pueden utilizar los elementos superpesados, cada nuevo descubrimiento amplía nuestro conocimiento científico. La creación del elemento 116 con un haz de titanio es un gran éxito y sienta las bases para encontrar más elementos en el futuro.