Desentrañando el vínculo entre el calentamiento ártico y la dinámica del polvo polar
MadridUn estudio reciente revela que el polvo en el Ártico desempeña un papel crucial en el clima de la región, influyendo en la formación de nubes y el calentamiento del área. El Ártico se está calentando mucho más rápido que el resto del mundo, a un ritmo de dos a cuatro veces mayor. Este rápido cambio ha puesto de relieve un proceso de retroalimentación que implica al polvo ártico, lo que podría transformar nuestra comprensión sobre la formación de nubes en las zonas polares.
El Ártico se está calentando de dos a cuatro veces más rápido que el promedio global. Se han observado emisiones aumentadas de polvo en áreas libres de nieve y hielo. Este polvo ártico facilita la formación de cristales de hielo en las nubes, lo que lleva a nubes más delgadas y de vida más corta. Estas nubes podrían contrarrestar los cambios inducidos por la temperatura.
Investigadores japoneses han descubierto que el polvo proveniente de nuevas áreas expuestas en el Ártico puede alterar la formación de las nubes. Cuando la nieve y el hielo se derriten, más polvo entra en la atmósfera. Este polvo contribuye a la formación de cristales de hielo en las nubes, lo que puede hacer que sean más delgadas e inestables. Las nubes más delgadas podrían no reflejar bien la luz solar, provocando un mayor calentamiento en la región.
Las temperaturas más altas en el Ártico suelen hacer que las nubes contengan más gotas de agua que cristales de hielo, lo cual ayuda a enfriar la superficie durante el verano al reflejar más luz solar. Sin embargo, el polvo ártico está alterando este patrón. El estudio indica que el aumento de polvo en la región provoca la formación de más cristales de hielo en las nubes, afectando su duración y grosor en un 30% del área cada año y hasta un 70% durante el verano.
Muchos modelos climáticos no son precisos porque no consideran completamente los efectos del polvo ártico. Estos modelos generalmente solo se enfocan en los cambios de temperatura y pasan por alto el papel de las emisiones de polvo. Incluir el impacto del polvo podría mejorar las predicciones sobre los cambios climáticos en el Ártico.
Estos hallazgos subrayan la importancia de tener en cuenta el polvo del Ártico al predecir cambios climáticos. El polvo ártico es crucial para la formación de nubes, lo que influye en las proyecciones del clima. Los modelos climáticos actuales deben actualizar esta información para prever con precisión los cambios en el Ártico y comprender su impacto en el resto del mundo.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1038/s41612-024-00811-1y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Hitoshi Matsui, Kei Kawai, Yutaka Tobo, Yoshinori Iizuka, Sumito Matoba. Increasing Arctic dust suppresses the reduction of ice nucleation in the Arctic lower troposphere by warming. npj Climate and Atmospheric Science, 2024; 7 (1) DOI: 10.1038/s41612-024-00811-1Compartir este artículo