Renacer en Hong Kong: juventud enfrenta adversidades tras represión de Pekín

MadridCinco años después de las protestas a favor de la democracia en Hong Kong, muchos jóvenes intentan reconstruir sus vidas tras haber estado en prisión. Enfrentan numerosos obstáculos, como el estigma social y las limitadas oportunidades laborales. Mientras que los activistas más conocidos reciben atención, muchos otros exprotestantes no la obtienen.

Los jóvenes enfrentan diversas dificultades:

• Dificultad para encontrar empleo estable
• Estigma social y discriminación
• Incertidumbre legal y académica
• Acceso restringido a ciertas profesiones
• Carga emocional y psicológica

Más de 10,200 personas han sido detenidas desde que comenzaron las protestas. El malestar surgió debido al proyecto de ley de extradición, que ya ha sido retirado. Aproximadamente el 20% de los arrestados ha enfrentado o enfrenta consecuencias legales.

Un joven vestido con una camiseta negra que decía "Soy hongkonés" y con un tatuaje de su número de prisionero compartió su lucha. Solicitó cerca de 40 empleos antes de conseguir uno. Muchos empleadores temían que su historial criminal dañara la imagen de sus negocios. En su trabajo actual, algunos compañeros pro-China lo trataban mal y no le permitían participar en ciertos proyectos. Siente que la sociedad trata injustamente a los prisioneros políticos.

Muchas personas sienten miedo, incluso si no están en la cárcel. Un manifestante llamado Nick fue arrestado en 2019. Durante años no supo si sería acusado hasta que la policía le informó recientemente que su caso había sido cerrado. Esto lo hizo sentir muy ansioso.

Brandon Yau, secretario del grupo de apoyo a prisioneros Waiting Bird, comenta que algunos ex reclusos pueden regresar a sus antiguos empleos. Sin embargo, los docentes, trabajadores de la salud y asistenciales enfrentan más dificultades. Estos oficios suelen requerir licencias o forman parte del sector público. Los estudiantes temen si las escuelas los aceptarán tras un arresto, y muchas instituciones educativas no son de gran ayuda.

Yau afirma que muchos prisioneros serán liberados en los próximos dos años. La ciudad necesita prepararse para ofrecerles vivienda y ayudarles a reintegrarse en la sociedad. Cada año, cientos de personas son encarceladas por delitos relacionados con protestas o supuestas amenazas a la seguridad nacional. Para finales de 2023, alrededor de 780 personas estaban bajo custodia, casi un 50% más que el año anterior.

Jóvenes presos influenciados y las raíces profundas de las protestas, según discusión

Chris Tang, el ministro de seguridad de Hong Kong, opina que muchos jóvenes presos fueron desviados por otros. Él confía en que la sociedad ayudará a quienes realmente quieren cambiar. Sin embargo, los críticos argumentan que estos comentarios ignoran los problemas más profundos que provocaron las protestas.

Paul Yip, profesor en la Universidad de Hong Kong, observó que los empleadores están más dispuestos a contratar a jóvenes que estuvieron en prisión. Según Yip, estos ex reclusos suelen desempeñarse bien en sus trabajos. Resalta la importancia de brindarles apoyo para reconstruir sus vidas. Él cree que ayudarles es crucial para el futuro de todos. Además, ha notado que los jóvenes que ha contratado son entusiastas y responsables.

Después de la represión, los habitantes de Hong Kong se esfuerzan por reconstruir sus vidas, aunque todavía enfrentan muchas dificultades.