Crisis en Sudán del Sur: fuerzas de seguridad sin sueldo
MadridSudán del Sur atraviesa una grave crisis económica. Los ingresos del petróleo están disminuyendo y, además, las fuerzas de seguridad no han recibido pago en meses. Profesores como Surur están solicitando pequeñas sumas de dinero a las familias de los estudiantes para sobrevivir, a pesar de que la educación es gratuita. El gobierno enfrenta una fuerte presión internacional para planificar las elecciones aplazadas, mientras la economía sigue empeorando.
A continuación, algunos datos clave sobre la situación:
- Las fuerzas de seguridad no han recibido su salario en meses.
- Los maestros están dependiendo de pequeñas contribuciones de las familias.
- La inflación ha alcanzado el 35% en el último año.
- La moneda local se ha depreciado frente al dólar estadounidense.
Sudán del Sur sigue exportando algo de petróleo, pero el presidente está frustrado por la mala gestión. El gobierno se sostiene más con los impuestos de mercancías importadas. Sin embargo, la corrupción impide que este dinero llegue a las arcas del estado. El presidente Salva Kiir ha ordenado al ministro de finanzas crear una cuenta única para todos los ingresos y detener las acciones corruptas.
Los fondos públicos están disminuyendo debido a políticas deficientes y corrupción, lo que ha desviado dinero destinado al desarrollo. Recientemente, el Banco Africano de Desarrollo y el gobierno de Sudán del Sur firmaron un acuerdo de $46,2 millones para impulsar la agricultura hasta diciembre de 2030, lo que ofrece algo de esperanza. A pesar de ello, la frustración de la comunidad internacional sigue en aumento.
Las elecciones se han aplazado y la violencia entre comunidades persiste, lo que hace que muchas personas pierdan la esperanza. Muchas familias se ven obligadas a abandonar sus hogares y viven en la pobreza. Según las Naciones Unidas, el 75% de la población necesita ayuda humanitaria. Las elecciones debieron realizarse el año pasado, pero fueron reprogramadas para diciembre. Sin embargo, la ONU advierte que aún queda mucho por hacer para que estas elecciones sean posibles.
Sudán del Sur busca diversificar su economía más allá del petróleo. El gobierno está considerando el turismo y la agricultura de frutas y verduras como nuevas fuentes de ingreso. No obstante, estos proyectos tardarán en generar ganancias significativas. Actualmente, la situación es crítica con servicios esenciales inoperantes y salarios impagos.
El problema principal radica en la corrupción generalizada y la mala gobernanza. El hecho de que haya habido seis ministros de Finanzas desde 2020 demuestra lo inestable que es el liderazgo económico. Esta inestabilidad perjudica las inversiones extranjeras y los negocios locales. Además, la fuerte dependencia de los ingresos petroleros sin diversificar la economía la hace vulnerable.
La confianza en el gobierno está disminuyendo y la alta inflación complica la vida de las personas. Aunque el gobierno tiene fondos, no está pagando salarios, lo que genera dudas sobre su capacidad de gestión. Urge implementar políticas financieras más claras y estrictas para mejorar la situación.
Los desafíos económicos de Sudán del Sur necesitan acciones rápidas y claras para solucionarlos. El país requiere un mayor apoyo para diversos tipos de negocios, y la ayuda internacional es crucial.
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