Nuevas esperanzas para vacunas contra enfermedades tropicales desatendidas: avance en la investigación de la leishmaniasis

MadridCientíficos de la Universidad de York y la Hull York Medical School han descubierto un nuevo método para estudiar la leishmaniasis. Ahora pueden infectar de manera segura a voluntarios con el parásito que causa la enfermedad. Esto les permite entender mejor la respuesta inmunológica del cuerpo y facilita la creación de vacunas.

Los estudios de infección controlada en humanos pueden ayudar a probar la seguridad y eficacia de nuevas vacunas. Sin embargo, estos estudios son raros para enfermedades tropicales desatendidas como la leishmaniasis. Más de un millón de personas se ven afectadas cada año por esta enfermedad, que provoca dolorosas úlceras que cicatrizan lentamente y dejan cicatrices, especialmente en mujeres y niños. Actualmente, no existen vacunas ni medicamentos para prevenir esta afección.

Detalles clave del estudio:

• Participaron catorce voluntarios
• Transmitieron la enfermedad moscas de arena infectadas con una especie leve del parásito
• Se monitorearon las lesiones en los sitios de las picaduras
• La infección se terminó mediante biopsia de piel
• Se estudiaron las respuestas inmunitarias en los sitios de infección

El profesor Paul Kaye de la Hull York Medical School declaró que este estudio es relevante. Proporciona una forma rápida y económica de evaluar vacunas y métodos para prevenir la leishmaniasis. Además, aporta nueva información sobre cómo el sistema inmunológico combate la infección. La ayuda de los voluntarios es fundamental para ofrecer esperanza a los afectados por esta enfermedad.

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La profesora Alison Layton, líder clínica del estudio, subrayó la importancia de las enfermedades de la piel en la Facultad de Medicina. Señaló que el estudio demuestra que el modelo de infección es seguro y bien tolerado. Este estudio se alinea con su enfoque global en la salud de la piel y podría beneficiar a muchas personas.

Los investigadores utilizan mosquitos de arena para propagar la infección de manera natural. Posteriormente, emplean herramientas avanzadas para monitorear en tiempo real cómo se desarrollan la infección y la respuesta inmunológica. Este modelo permite probar rápidamente nuevas vacunas y comprender mejor el funcionamiento de la inmunidad.

Los investigadores emplearán este modelo para diseñar ensayos clínicos. Probarán una vacuna desarrollada en la Escuela de Medicina de Hull York y otras alternativas. Los modelos de infección controlada en humanos ya han sido útiles para crear vacunas contra enfermedades como el cólera, la malaria, la gripe, el dengue y el COVID-19.

El estudio fue realizado por equipos de la Hull York Medical School, York and Scarborough Teaching Hospitals NHS Trust, Universidad Carolina de Praga, el Centro Médico Chaim Sheba, la Universidad de Tel Aviv y la Escuela de Medicina de la Universidad Hebrea-Hadassah. La investigación fue financiada por una subvención del Consejo de Investigación Médica del Reino Unido (MRC) y el Departamento para el Desarrollo Internacional (DFID). También forma parte del programa EDCTP2, que cuenta con el apoyo de la Unión Europea.