La FDA y el Departamento de Justicia cooperarán más contra los cigarrillos electrónicos ilegales

MadridLa FDA y el Departamento de Justicia anunciaron que colaborarán para detener los cigarrillos electrónicos ilegales. Este anuncio se produce pocos días antes de una audiencia en el Senado que investigará por qué no se han tomado más medidas contra quienes fabrican y venden cigarrillos electrónicos no autorizados.

En 2022, expertos solicitaron la formación de un grupo de trabajo compuesto por diversas agencias para solucionar el problema. Criticaron vehementemente el programa de tabaco de la FDA. Señalaron que tanto los grupos de salud como las compañías tabacaleras están descontentos con la regulación del vapeo por parte de la FDA. Los grupos de salud desean que la FDA tome medidas más estrictas contra los cigarrillos electrónicos con sabores ilegales que atraen a los adolescentes. Por otro lado, las compañías tabacaleras quieren que la FDA apruebe nuevos cigarrillos electrónicos que podrían ayudar a los adultos a dejar de fumar.

En los últimos años, la FDA ha enviado numerosas cartas de advertencia a tiendas de vapeo y fabricantes de cigarrillos electrónicos. Estas cartas les ordenan dejar de vender ciertos productos. Sin embargo, algunas tiendas y fabricantes ignoran estas advertencias. Cada vez más, los funcionarios de la FDA afirman que necesitan que el Departamento de Justicia tome medidas legales contra aquellos que no siguen las normas.

Aquí tienes un resumen de los puntos clave:

• La FDA y el Departamento de Justicia se están uniendo para combatir los cigarrillos electrónicos ilegales.
• Esto ocurre antes de una audiencia del Senado sobre la falta de aplicación de normas contra los fabricantes de cigarrillos electrónicos.
• En 2022, los expertos sugirieron un grupo de trabajo para ayudar al programa de tabaco de la FDA.
• Tanto los grupos de salud pública como las empresas de tabaco tienen problemas con el enfoque actual de la FDA.
• La FDA ha enviado muchas cartas de advertencia, pero algunas son ignoradas.
• El Departamento de Justicia es necesario para presentar demandas contra los infractores.

Los grupos de salud pública exigen medidas estrictas. Están pidiendo a la FDA que prohíba la venta de los cigarros electrónicos con sabores que atraen a los adolescentes. Estos grupos llevan años preocupados, citando estudios que demuestran que estos productos llevan a los jóvenes a la adicción a la nicotina. Creen que la FDA tiene el poder para actuar, pero no está haciendo lo suficiente para hacer cumplir las normas.

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Las compañías tabacaleras tienen sus quejas. Afirman que los nuevos cigarrillos electrónicos podrían ayudar a los fumadores a dejar de fumar cigarrillos convencionales. Quieren que la FDA apruebe estos productos más rápidamente. Consideran que el largo proceso de la FDA es perjudicial. Estas empresas creen que tener más opciones de cigarrillos electrónicos facilitaría que los adultos dejen de fumar.

La FDA ha enviado numerosas cartas de advertencia a empresas en los últimos años. Estas misivas solicitan que ciertos productos de cigarrillos electrónicos sean retirados de las estanterías o sitios web. A pesar de las advertencias, muchas empresas no cumplen con las normas. La FDA ha manifestado que el Departamento de Justicia debe demandar a las empresas que ignoren dichas advertencias.

Lo más probable es que en la audiencia del Senado se discuta acerca del grupo de trabajo propuesto el año pasado. Esta iniciativa surgió de un informe significativo. El objetivo del grupo de trabajo es mejorar la cooperación entre la FDA y otras agencias gubernamentales, como el Departamento de Justicia.

La FDA y el Departamento de Justicia desean colaborar para sancionar más severamente a quienes venden cigarrillos electrónicos ilegales. De esta manera, pueden tomar medidas más rápidas y aplicar castigos más duros a los infractores. Además, esto les ayudará a hacer cumplir mejor las leyes y regulaciones vigentes.

La FDA quiere demostrar que está comprometida a resolver el problema del vapeo. Su objetivo es mostrar que están prestando atención a los defensores de la salud pública y a la industria tabacalera. Al colaborar con el Departamento de Justicia, esperan cerrar brechas legales y mejorar la aplicación de las normas.