Mensajeros celulares abren camino a nuevas pruebas diagnósticas para el cáncer de sangre.

MadridUn reciente estudio ha descubierto una nueva relación entre las pequeñas partículas liberadas por las células, conocidas como vesículas extracelulares (EVs), y el daño a los vasos sanguíneos en el cáncer. Este hallazgo podría cambiar la forma en que diagnosticamos y monitoreamos enfermedades como la leucemia. Por primera vez, los investigadores han capturado imágenes en vivo de estas EVs formándose en la médula ósea de ratones, revelando cómo podrían causar daño tisular. Este descubrimiento podría conducir a una prueba de sangre más eficaz para medir el daño tisular en pacientes con cáncer.

El estudio proporciona perspectivas a través de:

Técnicas de imagen: Uso de microscopía de alta resolución para examinar vesículas extracelulares (EVs) en células de médula ósea. Relación de niveles de EV: Analizar cómo la presencia de EVs en la sangre se relaciona con la gravedad del daño tisular. Validación entre especies: Resultados exitosos en muestras de peces, ratones y humanos.

Las vesículas extracelulares son cruciales para la comunicación entre células, facilitando el traslado de proteínas, lípidos y material genético. La investigación de estas diminutas estructuras ha sido un reto debido a su tamaño reducido, pero las nuevas tecnologías de imagen han simplificado este proceso. Este avance está permitiendo a los científicos comprender mejor el desarrollo de las enfermedades.

Lea también:

Ayer · 21:01

Captura de CO2: innovación térmica para una industria más limpia y sostenible

Monitorear los vehículos eléctricos (VE) va más allá de solo identificar problemas. Permite a los médicos diseñar planes de tratamiento personalizados basados en el nivel de daño tisular en los pacientes. Dado que los niveles de los VE pueden indicar el avance de una enfermedad, son útiles para decidir la intensidad y tipo de tratamiento necesario.

Estos descubrimientos podrían revolucionar el tratamiento del cáncer al ofrecer una forma de seguir la enfermedad sin necesidad de cirugía. Los métodos actuales suelen requerir biopsias, que pueden ser riesgosas e incómodas. Utilizar un análisis de sangre para verificar los niveles de EV es más seguro y rápido, permitiendo un monitoreo más frecuente y cambios en el tratamiento de manera más ágil.

Instituciones como WEHI y el Centro de Investigación La Trobe para Vesículas Extracelulares están colaborando en este estudio. Esta cooperación destaca la relevancia del trabajo en equipo en el ámbito científico. Al compartir conocimientos y recursos, los investigadores avanzan en convertir sus hallazgos en herramientas médicas útiles.

El descubrimiento de que los EVs están involucrados en el daño tisular podría transformar la manera en que los médicos detectan y tratan el cáncer. A medida que avanza la investigación, está permitiendo a los doctores incorporar estos hallazgos en la práctica médica habitual, lo que podría resultar en mejores resultados para los pacientes.