Danza crucial del Atlántico y Ártico: clave en la sinfonía climática de la Tierra
MadridLa mezcla de aguas entre el Océano Atlántico y el Océano Ártico es crucial para mantener en funcionamiento la Circulación Meridional de Retorno del Atlántico (AMOC), la cual ayuda a regular el clima terrestre. Los científicos han descubierto que esta mezcla transforma el 33 por ciento de las aguas cálidas y saladas del Atlántico en aguas más frías, frescas y densas. Este proceso fortalece el AMOC y facilita la distribución del calor a nivel global.
Hallazgos clave del estudio:
- El 72 por ciento del componente inferior de la Cinta Transportadora Oceánica del Atlántico (AMOC) está formado por aguas atlánticas mientras que el 28 por ciento proviene del Ártico.
- La mezcla en el Estrecho de Dinamarca es fundamental para aumentar la densidad del agua antes de que fluya hacia el sur.
- El 33 por ciento de este proceso de transformación del agua se debe a la mezcla oceánica.
- El 67 por ciento se atribuye a interacciones entre el océano y la atmósfera.
El AMOC influye en el clima. Si este sistema se debilita, podrían ocurrir cambios significativos. Por ejemplo, el norte de Europa, incluida el Reino Unido, podría volverse mucho más frío a pesar de estar en la misma latitud que áreas con climas más suaves. El AMOC también afecta los niveles del mar en la costa este de Estados Unidos.
A medida que la Tierra se calienta debido al cambio climático, las aguas superficiales se vuelven más cálidas y menos saladas. Esto dificulta la mezcla de las aguas del Atlántico y del Ártico. Cuando este proceso de mezcla se debilita, el flujo sur del Circuito de Circulación Meridional del Atlántico (AMOC) se hace menos denso y más superficial. Como resultado, el AMOC se debilita.
Un AMOC más lento puede tener serias consecuencias en el clima. Esto podría resultar en que el dióxido de carbono permanezca menos tiempo en el océano antes de regresar a la atmósfera, acelerando el cambio climático. Si el AMOC se debilita significativamente, podría provocar alteraciones grandes y posiblemente permanentes en el clima global.
Los modelos actuales de la Circulación Meridional de Vuelco del Atlántico (AMOC) necesitan incluir con precisión la mezcla de aguas atlánticas y árticas para prever el clima futuro. Comprender la importancia de esta mezcla destaca la necesidad de representarla en los modelos climáticos. Abordar el calentamiento global es esencial para evitar que el AMOC se ralentice o colapse.
El calentamiento global representa una grave amenaza para nuestro clima. Es fundamental reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y abordar el cambio climático de manera urgente. Estudios recientes sobre la mezcla de aguas del Atlántico y el Ártico, que afectan la fuerza de la Circulación Meridional de Retorno del Atlántico (AMOC), subrayan la necesidad de tomar medidas inmediatas.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1038/s41467-024-51777-wy su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Dipanjan Dey, Robert Marsh, Sybren Drijfhout, Simon A. Josey, Bablu Sinha, Jeremy Grist, Kristofer Döös. Formation of the Atlantic Meridional Overturning Circulation lower limb is critically dependent on Atlantic-Arctic mixing. Nature Communications, 2024; 15 (1) DOI: 10.1038/s41467-024-51777-wCompartir este artículo