Trump se une a Harris para reducir el peligro de la marihuana

MadridEl expresidente Donald Trump ahora apoya la idea de hacer que la marihuana sea una droga menos peligrosa, al igual que la vicepresidenta Kamala Harris. Esto representa un cambio significativo con respecto a su mandato anterior, cuando permitía que los estados decidieran sus propias reglas sobre la marihuana.

Harris apoya firmemente la despenalización de la marihuana. Ha criticado a la DEA por clasificar la marihuana al mismo nivel que la heroína y el LSD. Cuando era Fiscal General de California, aplicó las leyes sobre el cannabis y se oponía a la legalización del uso recreativo, pero desde entonces ha cambiado su postura.

Durante la presidencia de Trump, el Fiscal General Jeff Sessions revocó una normativa de la época de Obama que permitía a los estados gestionar sus propias leyes sobre la marihuana sin interferencia federal. Esto generó discrepancias entre las regulaciones federales y estatales sobre el cannabis, provocando confusión.

La DEA está considerando cambiar la clasificación de la marihuana porque el presidente Joe Biden se lo pidió. Mover la marihuana a la Lista III, donde se encuentran drogas como la ketamina y algunos esteroides, no la haría legal en todo el país, pero sería vista como menos propensa al abuso. Esta decisión podría aplazarse hasta tener un nuevo presidente, lo que demuestra la importancia de las opiniones de los candidatos sobre la marihuana.

La nueva postura de Trump refleja el creciente apoyo público a las reformas en las leyes sobre el cannabis. Una reciente encuesta de Gallup muestra este aumento de respaldo.

• El 70% de los adultos apoya la legalización, el nivel más alto registrado
• Esto es más del doble del apoyo registrado en el año 2000
• El apoyo es aún mayor entre los votantes jóvenes, cruciales en estados decisivos

Muchos estados están avanzando sin esperar a que haya cambios federales. Hasta ahora, 38 estados permiten la marihuana medicinal y 24 han legalizado su uso recreativo. Esta disparidad en las regulaciones entre el gobierno federal y los estados genera problemas, especialmente para las empresas de cannabis.

David Culver, alto funcionario del Consejo de Cannabis de EE. UU., afirmó que modificar las leyes sobre el cannabis es una estrategia política acertada. Esto está en sintonía con la opinión de muchos votantes jóvenes que apoyan la legalización de la marihuana.

Trump y Harris están a favor de modificar la clasificación del marihuana a nivel federal. Esto podría unir a ambos partidos políticos para actualizar las leyes nacionales sobre drogas. Sin embargo, no está claro si esto resultará en nuevas leyes antes de las próximas elecciones presidenciales. La industria del cannabis seguirá de cerca la situación, ya que los cambios en la ley federal podrían impactar el mercado y la regulación del marihuana.