El control mediático de Orbán: silenciar disidencias y moldear mentes
MadridEl Primer Ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha utilizado el control de los medios para limitar el escrutinio público e influir en la narrativa nacional. Su partido Fidesz ha ganado cuatro elecciones con amplias mayorías en el parlamento, éxito que se debe en gran medida al dominio gubernamental sobre la mayoría de los medios de comunicación.
- Los políticos de la oposición obtienen un tiempo mínimo en los medios
- Los canales públicos repiten los argumentos de Fidesz
- Los leales al gobierno dominan la propiedad de los medios
Los comentaristas independientes rara vez aparecen en los medios progubernamentales. Los canales públicos de televisión y radio respaldan las opiniones de Fidesz. Recientemente, transmitieron varios videos de campaña de Fidesz durante los segmentos informativos, a pesar de las advertencias de la comisión electoral húngara.
El partido TISZA, liderado por Magyar, ha criticado a Orbán por su control sobre los medios de comunicación. La agrupación ha prometido combatir la corrupción y restaurar las prácticas democráticas. Magyar, quien fue elegido al Parlamento Europeo, utilizó las redes sociales y habló directamente con los votantes para evitar los medios de comunicación tradicionales.
En las áreas rurales, el control de los medios tradicionales por parte de Fidesz dificulta que los partidos de oposición lleguen a la gente. Reporteros Sin Fronteras afirma que el gobierno de Orbán ha tomado el control de gran parte de los medios mediante adquisiciones realizadas por empresarios vinculados al gobierno. Este grupo ahora controla el 80% del mercado mediático en Hungría. En 2021, Orbán se convirtió en el primer líder de la UE en ser catalogado como un "depredador" de la prensa por Reporteros Sin Fronteras.
Varios eventos resaltan este control: En 2016, cerró el diario más antiguo de Hungría tras su compra por un empresario afín a Orbán. En 2018, los propietarios de casi 500 medios progubernamentales los transfirieron a una fundación dirigida por partidarios de Orbán. En 2020, el personal del mayor sitio de noticias en línea de Hungría, Index, renunció después de que el editor principal fuera despedido por presión política.
Periodistas independientes enfrentan grandes desafíos para mantenerse competitivos. Gábor Polyák de la Universidad Eötvös Loránd señala que, a pesar de los esfuerzos sostenidos, el control gubernamental sobre la propiedad y el contenido de los medios sigue siendo un problema significativo.
El gobierno húngaro dirigido por Orbán controla la mayoría de los medios de comunicación, restringiendo el acceso a diversas perspectivas. Esta manipulación impacta tanto el debate público como la toma de decisiones. Aunque es posible encontrar otras fuentes de información en línea, los medios tradicionales aún tienen una influencia importante, especialmente en las zonas rurales con menos acceso a internet.
El control de los medios por parte de Orbán refleja una tendencia más amplia hacia un autoritarismo creciente en la región. Otros líderes podrían imitar sus métodos, lo que pondría en peligro la libertad de prensa, fundamental para la democracia. La reacción de la comunidad internacional será crucial para el futuro de los medios y la democracia en Hungría.
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