Dos nuevos proyectos de captura de carbono en Luisiana

MadridNuevas instalaciones para eliminar carbono en el noroeste de Luisiana

En 2022, ExxonMobil, CF Industries y EnLink Midstream se comprometieron a eliminar 2 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono de la atmósfera cada año. Luisiana produce mucho gas natural y también emite grandes cantidades de dióxido de carbono. El estado enfrenta graves problemas climáticos, como huracanes, erosión costera y niveles bajos de los ríos.

Los defensores de la captura de carbono argumentan que es necesaria para combatir el cambio climático, y un informe de la ONU de noviembre de 2021 lo respalda. Según el documento, la captura de carbono debe ser una de las estrategias para reducir las emisiones globales. Sin embargo, también destaca que la energía solar y eólica están mejorando a un ritmo más rápido que la tecnología de captura de carbono.

Los críticos están preocupados por la participación de las compañías petroleras en estos proyectos porque podría perpetuar el uso de combustibles fósiles. Los habitantes locales también están inquietos por la seguridad de los sitios de almacenamiento. Proyectos anteriores han sido cuestionados por los posibles riesgos para la salud pública. Las autoridades aseguran que implementarán medidas de protección para supervisar el sistema y el proceso.

Las nuevas instalaciones de Heirloom están diseñadas para eliminar 320,000 toneladas de dióxido de carbono cada año. Utilizan piedra caliza para absorber rápidamente el dióxido de carbono, reduciendo el proceso de años a solo tres días. El dióxido de carbono capturado se almacena luego bajo tierra.

Detalles clave del proyecto:

• Ubicación: Puerto de Caddo-Bossier en Shreveport, Louisiana
• Primera instalación operativa: 2026
• Puesta en marcha de la instalación más grande: 2027
• Eliminación anual de CO2: 320,000 toneladas

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Autoridades aún están determinando dónde almacenar el carbono capturado bajo tierra. Defensores consideran que incluso las pequeñas acciones son vitales para combatir el cambio climático. Shashank Samala, CEO de Heirloom, afirma que este proyecto puede ser un modelo para otros lugares del mundo. Samala también destaca que es necesario el esfuerzo de todos para resolver el problema.

Los defensores creen que incluso las reducciones pequeñas en las emisiones son significativas. Afirman que la expansión de esta tecnología puede marcar una gran diferencia. Son optimistas y esperan que proyectos similares se inicien en más lugares alrededor del mundo.

Luisiana depende en gran medida de la industria del petróleo y gas. En 2021, fue el tercer mayor productor de gas natural en Estados Unidos. Muchos empleos en el estado están ligados a este sector. Sin embargo, en el mismo año, Luisiana tuvo la cuarta mayor emisión per cápita de dióxido de carbono del país proveniente de la energía.

Las comunidades locales han sufrido contaminación intensa durante años. A los críticos les preocupa que los nuevos sitios de eliminación de carbono puedan empeorar la situación. Están solicitando a las autoridades y empresas información clara y planes detallados.

Los defensores afirman que las nuevas tecnologías y normas estrictas pueden reducir riesgos. Consideran que estos proyectos son esenciales para disminuir las emisiones de carbono. A medida que los efectos del cambio climático empeoran, hay una necesidad creciente de encontrar y aplicar soluciones efectivas.

Las nuevas instalaciones en Luisiana forman parte de un proyecto global. Aún no está claro si cumplirán sus objetivos ni cómo impactarán a las comunidades locales.