Crisis de suministro de fluidos intravenosos por huracán

MadridCierre Temporal de Planta de Baxter en Carolina del Norte Por Huracán Helene

El huracán Helene ha provocado inundaciones que obligaron al cierre temporal de una planta de Baxter International en North Cove, Carolina del Norte. Esta instalación produce una gran cantidad de fluidos intravenosos estériles utilizados en todo Estados Unidos. Más de 2,500 personas trabajan en esta planta, siendo el mayor centro de fabricación de Baxter. El cierre podría tener repercusiones inmediatas y a largo plazo en el sector de la salud.

Baxter está restringiendo la cantidad de suministros que los clientes pueden adquirir para evitar que compren en exceso. Esta medida refleja los problemas actuales en la cadena de suministro y las dificultades que enfrentarán los hospitales para mantener suficientes fluidos intravenosos. Funciones hospitalarias cruciales están en riesgo ya que necesitan estos fluidos para proporcionar hidratación y medicación a los pacientes.

Áreas Afectadas:

• Suministro de fluidos intravenosos
• Soluciones para diálisis renal en el hogar
• Cirugías electivas
• Métodos de administración de medicamentos

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Un problema en la cadena de suministro de productos sanitarios se agrava debido a la interrupción de uno de los principales proveedores. Es difícil mantener un inventario de líquidos intravenosos porque requieren condiciones de almacenamiento específicas y tienen una corta vida útil. Esto es especialmente preocupante para los hospitales más pequeños, que generalmente solo cuentan con suministros para unos pocos días.

Los hospitales buscan maneras innovadoras para enfrentar la situación. Por ejemplo, Mass General Brigham está utilizando sus recursos de manera diferente al ofrecer agua o Gatorade en casos no críticos y administrando medicamentos con jeringas en lugar de vías intravenosas. Los pacientes que necesitan diálisis podrían enfrentar demoras o ajustes en sus tratamientos mientras los proveedores revisan sus prescripciones.

Baxter está investigando cómo otras fábricas pueden aumentar la producción utilizando productos que aún tienen en stock y que no fueron afectados por la tormenta. Incrementar la producción rápidamente y organizar estos cambios es desafiante. Otros fabricantes podrían intentar aumentar su producción, pero enfrentan dificultades debido a regulaciones, problemas de entrega y limitaciones en la producción.

El futuro de la planta es incierto. Un suceso similar ocurrió el año pasado cuando una planta de Pfizer en Carolina del Norte fue golpeada por un tornado y tardó unas diez semanas en reanudar actividades. Esto indica que el proceso de recuperación podría no ser rápido. Los daños a la infraestructura dificultan el acceso al lugar, lo que complica aún más la reanudación del trabajo. El sistema de salud requerirá una planificación cuidadosa y soluciones flexibles para enfrentar la situación.