Extremista de ultraderecha recibe 9 años por ataque violento en hotel
MadridUn hombre ha sido condenado a 9 años de prisión por su participación en un disturbio de extrema derecha en un hotel en Inglaterra. El motín ocurrió un domingo por la tarde a principios de agosto e involucró comportamientos violentos y racistas.
El juez expresó su gran preocupación por partes de un informe previo a la sentencia que revelaban que el acusado, Birley, tenía un interés en ideas supremacistas blancas. Birley tiene antecedentes penales que incluyen acoso racialmente agravado. Admitió haber cometido incendio con intención de poner en peligro la vida, participar en desorden violento y portar un arma ofensiva.
El disturbio incluyó una serie de actos preocupantes:
- Birley añadió madera a un fuego que se había iniciado en un contenedor colocado contra una salida.
- Él ayudó a lanzar otro contenedor al fuego.
- Fue filmado arrojando objetos a los agentes de policía y agitando una porra policial.
- Lanzó un contenedor grande contra una fila de policías con escudos antidisturbios.
La violencia estalló en varias ciudades y pueblos de Inglaterra después de un mortal apuñalamiento en una clase de baile el 29 de julio. Falsos rumores de que el sospechoso era un solicitante de asilo provocaron reacciones violentas de grupos de extrema derecha.
Grupos de extrema derecha aprovecharon el incidente para difundir temor sobre la inmigración, centrando su atención en los migrantes que llegan en pequeñas embarcaciones desde Francia. El juez dejó claro que los eventos en Rotherham no fueron protestas reales, sino manifestaciones llenas de racismo.
En todo el país se registraron eventos violentos, incluyendo la quema de una biblioteca, ataques a mezquitas y lanzamiento de bengalas contra una estatua de Winston Churchill. Los disturbios se calmaron tras una fuerte respuesta policial, que resultó en 1,380 arrestos y 863 cargos. Las investigaciones sobre los disturbios continúan en curso.
Este caso demuestra los peligros de cuando las creencias extremas se convierten en violencia. La policía y los tribunales actuaron rápidamente para restaurar la paz y castigar a los responsables. Este incidente advierte que tales actos no serán tolerados. Además, pone de manifiesto cómo la desinformación y la xenofobia pueden afectar la seguridad pública.
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