Embajada afgana reabre en Omán: el nuevo enfoque del Talibán

Tiempo de lectura: 2 minutos
Por Maria Lopez
- en
Bandera afgana ondeando sobre el edificio de la embajada en Omán.

MadridLa embajada de Afganistán en Omán ha vuelto a abrir, según informan los talibanes. Este esfuerzo de los líderes afganos actuales busca fomentar y consolidar relaciones diplomáticas, a pesar de los problemas internacionales que aún enfrenta su gobierno.

Mawlavi Rahmatullah Takal, encargado de negocios de la embajada afgana en Mascate, se muestra optimista sobre la reapertura de la embajada. Afirmó que colaborando con el país anfitrión se podrán fortalecer los lazos políticos, económicos, sociales y religiosos entre Kabul y Mascate.

El Ministerio de Asuntos Exteriores afgano ha informado:

  • 39 misiones diplomáticas están ahora bajo control del Talibán
  • El mes pasado se produjo la visita de mayor nivel hasta la fecha por parte del Primer Ministro de Uzbekistán, Abdulla Aripov, desde la toma de poder del Talibán
  • Se han cerrado embajadas en localidades importantes como Londres y Oslo, mientras que otras siguen operando

Los talibanes están trabajando cuidadosamente en sus relaciones internacionales para alcanzar sus objetivos más amplios. Buscan establecer conexiones sólidas con países importantes de la región. A diferencia de los gobiernos afganos anteriores, que dependían principalmente del apoyo de países occidentales como Estados Unidos, los talibanes ahora se enfocan en forjar estrechos lazos con naciones vecinas y actores regionales poderosos. Esta estrategia podría ofrecer nuevas oportunidades económicas y ayudarles a obtener reconocimiento político.

El papel de Omán es destacado en este contexto diplomático. Omán ha mantenido una postura de neutralidad en una región dividida. Es conocido por mediar entre Arabia Saudita e Irán. Esto hace que Omán sea un buen socio para los talibanes, quienes aparentan querer colaborar con países que median en conflictos. La mayoría de la población en Omán sigue el islam ibadí, que es diferente del islam sunita y chiita y es conocido por ser más inclusivo. Esto podría ayudar a los talibanes a llevarse mejor con distintos grupos musulmanes, convirtiendo a Omán en un socio importante para ellos.

Países de todo el mundo discrepan sobre cómo tratar con los talibanes. Los países occidentales, en su mayoría, se niegan a reconocerlos oficialmente y aplican sanciones. Sin embargo, algunas naciones vecinas, centradas en necesidades prácticas y beneficios económicos, están más dispuestas a colaborar con el nuevo gobierno afgano.

La reapertura de la embajada en Omán refleja el objetivo de los talibanes de usar la diplomacia regional para evitar el aislamiento occidental. Esto podría aportar estabilidad a corto plazo y acceso a mercados e inversiones regionales. No obstante, es incierto si esta estrategia funcionará a largo plazo. Mientras Afganistán sigue bajo el régimen talibán, la comunidad internacional observará atentamente estos acontecimientos.

Mundo: Últimas noticias
Leer siguiente:

Compartir este artículo

Comentarios (0)

Publicar un comentario