Algunos refugiados sirios arriesgan regresar a zonas opositoras
MadridLíbano es el país con más refugiados per cápita en el mundo. Alrededor de 780,000 refugiados sirios están registrados con la agencia de la ONU, aunque muchos más no están registrados. El país ha enfrentado presión durante años. Desde la crisis económica de 2019, cada vez más personas han estado pidiendo que los refugiados sean devueltos a Siria o trasladados a otros lugares.
En abril, aumentaron las tensiones. Un miembro del partido Fuerzas Libanesas, Pascal Suleiman, fue asesinado. Las autoridades militares informaron que ocurrió durante un intento fallido de robo de auto por parte de una banda siria. Esto provocó actos de violencia contra sirios por parte de grupos locales. Después, las fuerzas de seguridad libanesas comenzaron a tomar medidas contra los refugiados. Realizaron redadas en negocios que empleaban a trabajadores sirios indocumentados y los clausuraron.
Muchas autoridades devolvieron a muchos refugiados. El gobierno libanés también organizó viajes para que los refugiados regresaran a zonas de Siria controladas por el gobierno. Pocos refugiados participaron en estos viajes porque temían ser castigados por el gobierno sirio y las fuerzas de seguridad.
A pesar de los problemas en el Líbano, la mayoría de los refugiados prefieren este país sobre el noroeste de Siria. Esta región, controlada por varios grupos armados, es bombardeada frecuentemente por el gobierno sirio y también sufre una disminución de la ayuda por parte de organizaciones internacionales.
Walid Mohammed Abdel Bakki halló la vida en Líbano demasiado difícil y regresó a Idlib en abril. Su hijo Ali, quien padecía esquizofrenia, desapareció tras ir a Beirut a visitar a su hermana y buscar trabajo. Posteriormente, Ali fue encontrado en una comisaría en Baabda con muchas heridas y contó que había sido golpeado y torturado. Falleció unos días después.
Algunos puntos clave son:
- La familia de Walid encontró a Ali en una estación de policía en Baabda
- Ali tenía múltiples heridas y habló de golpizas y electrocuciones
- Ali falleció unos días después de haber sido encontrado
- Un médico forense declaró que su muerte fue "natural"
- Walid pidió prestado $1,200 para pagar a los traficantes y regresar al noroeste de Siria
Un portavoz de inteligencia del ejército no hizo comentarios. El médico que examinó a Ali encontró varias heridas leves. Los escaneos no mostraron nada fuera de lo común, y el médico determinó que la muerte fue natural.
Walid pidió prestados $1,200 para pagar a los contrabandistas que lo llevaran a él y a su hijo menor al noroeste de Siria. Tuvieron que atravesar senderos difíciles en las montañas. Ahora, están alojados con familiares en Idlib. Su propia casa fue dañada por un ataque aéreo y luego saqueada.
Mohammad Hassan, director del Centro de Acceso para los Derechos Humanos, afirmó que los discursos de odio y la violencia contra los refugiados están llevando a algunos a abandonar Líbano. Algunos funcionarios libaneses han advertido sobre los ataques, pero siguen responsabilizando a los sirios de un aumento en la criminalidad y desean imponer reglas más estrictas.
Hassan mencionó que las bandas de contrabando y las milicias controlan la ruta desde el Líbano hasta Idlib. Es peligrosa, especialmente para las personas buscadas por el gobierno sirio, incluyendo a aquellos que evaden el servicio militar o que son sospechosos de oponerse al gobierno.
Ramzi Youssef, originario del sur de Idlib, se trasladó a Líbano en busca de trabajo antes de que comenzara la guerra civil en Siria. Ahora vive allí como refugiado.
La vida es difícil tanto para los refugiados como para los ciudadanos en Líbano debido a las tensiones y los problemas económicos.
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