Urgencia climática: piden ayuda financiera inmediata para países vulnerables

MadridSimon Stiell, el principal funcionario de clima de las Naciones Unidas, habló desde su ciudad natal de Carriacou, en Granada, dañada por un huracán, subrayando la urgente necesidad de abordar el cambio climático. Señaló que el huracán Beryl destruyó o dañó gravemente el 98% de las viviendas en Carriacou. Además, mencionó que el clima extremo se ha convertido en una experiencia común para muchos en todo el mundo. Este año, las olas de calor han causado miles de muertes en India y Arabia Saudita, y el calor severo dejó a millones sin electricidad en Texas.

Stiell también señaló que la crisis climática en curso podría causar $38 billones de daños económicos anualmente. Esto dificultaría a los países más pobres gestionar su deuda y mejorar sus sistemas de educación y salud.

Los países ricos debatirán un nuevo acuerdo de ayuda financiera para las naciones más pobres en noviembre. En 2009, las naciones adineradas se comprometieron a otorgar $100 mil millones anualmente para 2020, y se alcanzó esta meta a principios de este año. Sin embargo, Babayev afirmó en su carta que se necesitan más acciones. Las reuniones en Alemania en junio no lograron avanzar lo suficiente hacia un nuevo acuerdo de ayuda financiera.

Babayev está organizando una reunión en Azerbaiyán para finales de este mes con el objetivo de unir a los negociadores climáticos globales y promover nuevos compromisos financieros. Él cree que Azerbaiyán puede servir de puente entre los países ricos y pobres, pero todos deben estar dispuestos a participar sin demora.

Negociadores experimentados de Dinamarca y Egipto han sido elegidos para ayudar a establecer un nuevo objetivo de ayuda financiera. Este objetivo busca asistir a los países pobres a recuperarse de desastres climáticos y a reducir su deuda.

Estos anuncios revelan que es urgente tomar medidas y colaborar a nivel global. Los daños en Granada ilustran lo que puede suceder si no abordamos el cambio climático. Es crucial que los países en riesgo reciban ayuda financiera de inmediato para adaptarse y recuperarse. Los países más ricos, que han contaminado más en el pasado, tienen una responsabilidad mayor. La próxima cumbre climática en Azerbaiyán podría ser un gran avance si todos los países involucrados están verdaderamente comprometidos.