Nuevo estudio: la contaminación del aire y su impacto diverso en el ánimo de las personas

MadridUn estudio publicado en PLOS ONE por Michelle Ng de la Universidad de Stanford y su equipo demuestra que el estado de ánimo de las personas reacciona de manera diferente a la contaminación del aire. La investigación introduce un nuevo concepto llamado sensibilidad afectiva a la contaminación del aire (SACA), que evalúa cómo los cambios en la calidad del aire diario afectan los estados de ánimo de las personas.

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• La sensibilidad personal a la contaminación del aire varía
• El estudio emplea datos longitudinales intensivos
• La contaminación del aire influye en la excitación afectiva y el valence
• Las diferencias en la ASAP tienen implicaciones significativas

El estudio demuestra cómo las variaciones diarias en la contaminación del aire influyen en el estado de ánimo de las personas. Esto es fundamental porque reconoce que cada individuo responde de manera diferente al estrés ambiental. Investigadores monitorearon a 150 personas en los EE. UU. durante más de un año, utilizando datos locales de calidad del aire y encuestas psicológicas para comprender estas diferencias.

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Los resultados indicaron que las personas tenían niveles de energía más bajos en días con mayor contaminación del aire. Es crucial destacar que, mientras algunas personas experimentaron cambios significativos en su estado de ánimo, otras no notaron ninguna diferencia. Esta variabilidad sugiere que los consejos y acciones de salud deben adecuarse a cada individuo en lugar de ser uniformes para todos.

Estos resultados demuestran que la contaminación del aire afecta el estado de ánimo de las personas de manera diferente. Comprender esto puede mejorar los esfuerzos de salud pública. Podemos identificar a quienes son más afectados y ofrecerles ayuda específica. Por ejemplo, las personas con alta sensibilidad pueden recibir apoyo adicional para la salud mental cuando los niveles de contaminación son elevados.

Si la contaminación del aire reduce consistentemente las respuestas emocionales de las personas, podría disminuir su motivación para luchar contra el cambio climático. Una menor reacción emocional podría traducirse en un menor interés en defender el medio ambiente o en tomar medidas sobre cuestiones climáticas, lo que podría causar más daño ambiental debido a la menor participación del público.

Integrar el ASAP en la planificación de la adaptación climática puede originar estrategias más eficaces. Normalmente, la adaptación climática se centra en la salud física y los efectos económicos. Incorporar evaluaciones de salud mental basadas en el ASAP puede ofrecer una visión más completa de los riesgos climáticos. Esto podría modificar las normas de vivienda, la planificación urbana y los seguros al considerar cómo la calidad del aire impacta la salud mental.

Dado que el 90% de la población mundial vive en zonas con baja calidad del aire, el uso de evaluaciones ASAP en todas partes podría mejorar la salud global. Al comprender cómo la contaminación del aire afecta la salud mental, los recursos pueden dirigirse mejor a los lugares y personas que más lo necesitan.

Este estudio propone una forma detallada de comprender y abordar cómo la contaminación del aire afecta la salud mental, lo que facilita la creación de soluciones de salud pública más efectivas y personalizadas.