El ruido humano impide que ostras bebés encuentren su hogar, revela estudio de University of Adelaide
MadridUna nueva investigación de la Universidad de Adelaide revela que el ruido generado por actividades humanas dificulta a las crías de ostras encontrar su hogar. Las ostras jóvenes normalmente se guían por sonidos naturales para decidir dónde asentarse, pero el ruido antropogénico está perturbando este proceso. Este estudio subraya cómo la contaminación acústica está afectando negativamente a la vida marina.
Hallazgos clave incluyen:
- El ruido de actividades humanas está ahogando los sonidos naturales del océano.
- Las larvas marinas dependen de estos sonidos naturales para su navegación y asentamiento.
- La contaminación acústica de barcos, maquinaria y construcciones es problemática.
- La tecnología de enriquecimiento acústico podría no ser efectiva en áreas ruidosas.
La Dra. Brittany Williams y su equipo del Southern Seas Ecology Laboratories de la Universidad llevaron a cabo un estudio. La actividad humana está haciendo que el océano sea más silencioso debido a la pérdida de hábitats y al aumento de la contaminación acústica. Los sonidos naturales son cruciales para muchos animales marinos, ya que los utilizan para orientarse, alimentarse, evitar peligros y seleccionar lugares para vivir.
Dr. Dominic McAfee mencionó que investigaciones previas mostraron que la tecnología acústica podía ayudar a atraer ostras a los arrecifes restaurados usando altavoces. Sin embargo, un nuevo estudio revela limitaciones de este método, ya que en áreas con mucho ruido, los altavoces no lograron incrementar las larvas de ostras. Esto sugiere que el ruido humano podría estar interfiriendo con los sonidos naturales del océano.
El ruido humano afecta tanto a los animales terrestres como a los marinos. La contaminación acústica generada por actividades humanas está muy extendida y daña el medio ambiente. Los conservacionistas desean atraer ostras a los arrecifes reconstruidos utilizando sonidos naturales, pero la contaminación acústica lo complica.
El profesor Sean Connell de la Universidad de Adelaida y el Instituto de Medio Ambiente afirmó que la contaminación acústica puede tener efectos graves en los ecosistemas marinos, disminuyendo su salud y fortaleza.
A pesar de las dificultades, los investigadores mantienen la esperanza. Consideran que el enriquecimiento acústico aún podría ser efectivo en zonas más tranquilas con menos ruido de origen humano. En estos lugares, puede ayudar a atraer ostras, lo cual es fundamental para una restauración exitosa.
Esta investigación revela que la contaminación acústica en el océano es un problema en crecimiento. Debemos reflexionar sobre cómo nuestras acciones afectan a la vida marina. Los esfuerzos de conservación deben tener en cuenta estos nuevos descubrimientos. Las iniciativas para restaurar los hábitats marinos deberían centrarse en áreas más tranquilas donde las tecnologías acústicas sean más efectivas.
Reducir la contaminación acústica es crucial. Protege los ecosistemas marinos y beneficia tanto a los animales del mar como a los de tierra firme. Estos esfuerzos son esenciales para mantener nuestro entorno sostenible.
Los resultados del estudio se publicaron en la revista Proceedings of the Royal Society B.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1098/rspb.2024.0741y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Brittany R. Williams, Dominic McAfee, Sean D. Connell. Anthropogenic noise disrupts acoustic cues for recruitment. Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences, 2024; 291 (2027) DOI: 10.1098/rspb.2024.0741Compartir este artículo