Transforma la paternidad helicóptero en autonomía: tareas cotidianas como oportunidades de aprendizaje.
MadridLa sobreprotección ocurre cuando los padres realizan acciones por sus hijos que éstos podrían hacer por sí mismos. Esto priva a los niños de oportunidades para aprender, disminuyendo su confianza e independencia. Un estudio de Yale sugiere que los padres pueden ayudar al motivar a los niños a ver las tareas cotidianas como oportunidades para aprender.
Cuando los padres consideran las tareas como oportunidades de aprendizaje, tienden a intervenir menos. Un estudio de Yale demostró que al ver las tareas de esta manera, la frecuencia con la que los padres intervienen se reduce alrededor de un 50%. Este enfoque mejora la relación entre padres e hijos, permitiendo que los niños se vuelvan más independientes y fuertes.
Enmarcar tareas para los niños les ayuda de varias maneras. Les fomenta la independencia, ya que al ver estas tareas como oportunidades para aprender, quieren realizarlas por sí mismos. También los fortalece, permitiéndoles intentarlo repetidamente hasta completar algo por su cuenta. Finalmente, aumenta su confianza, pues al realizar las tareas con éxito, empiezan a creer en sus propias capacidades.
Los padres deberían motivar a sus hijos a ver tareas como vestirse, ordenar o realizar labores sencillas como oportunidades de aprendizaje. Es importante resaltar las habilidades que los niños desarrollan, tales como resolver problemas, tomar decisiones y mejorar sus movimientos finos.
Un estudio reveló que el tamaño de una oportunidad de aprendizaje no afecta el nivel de participación de los padres. Independientemente de la importancia de la tarea, percibirla como una oportunidad de aprendizaje lleva a menos interferencias. Esto demuestra que es la percepción de la oportunidad de aprendizaje lo que modifica el comportamiento, no la relevancia de la tarea.
Perspectiva y participación en el aprendizaje: Un vínculo revelador
Este método permite a los niños aprender mientras los padres se toman un respiro de su constante participación. Al aprovechar actividades cotidianas para el aprendizaje, los padres pueden relajarse y confiar en que sus hijos aprenderán por sí mismos, lo que contribuye a una vida familiar más saludable.
Tanto profesores como mentores pueden beneficiarse de este enfoque. Al presentar las tareas en clase o las actividades extracurriculares como oportunidades de aprendizaje, fomentan que los estudiantes se involucren más en su desarrollo.
Esta estrategia fomenta un mejor entorno para los niños tanto en el hogar como en la escuela, lo que puede influir positivamente en su desarrollo y motivación a lo largo del tiempo.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1111/cdev.14198y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Reut Shachnai, Mika Asaba, Lingyan Hu, Julia A. Leonard. Pointing out learning opportunities reduces overparenting. Child Development, 2024; DOI: 10.1111/cdev.14198Compartir este artículo