Buque francés rescata a tripulación de petrolero atacado en el mar Rojo

MadridDestructora francesa rescata a 29 personas tras ataque a petrolero en el Mar Rojo

Un destructor francés, parte de una misión de la Unión Europea, rescató a 29 personas de un petrolero atacado en el Mar Rojo. El incidente ocurrió a unos 140 kilómetros al oeste de Hodeida, Yemen, un puerto controlado por los rebeldes hutíes. La Operación de Comercio Marítimo del Reino Unido informó que hombres en pequeñas embarcaciones dispararon contra el petrolero, y luego cuatro proyectiles lo alcanzaron. Aún no está claro si dichos proyectiles eran drones o misiles.

Desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre, los hutíes han estado atacando embarcaciones. Han agredido a más de 80 barcos con el fin de presionar para que el conflicto en Gaza termine. Estos ataques se han vuelto cada vez más audaces, apuntando contra naves que tienen poca o ninguna relación con el conflicto, incluidas aquellas que se dirigen a Irán.

Puntos clave a tener en cuenta:

• Los hutíes han atacado más de 80 barcos con misiles y drones.
• Han capturado un buque y hundido otros dos.
• Las coaliciones lideradas por EE. UU. han interceptado otros misiles y drones.
• Las respuestas militares de EE. UU. incluyen ataques aéreos en Hodeida y un mayor despliegue naval.

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Los hutíes están utilizando drones, probablemente con ayuda de la tecnología iraní, para alcanzar objetivos con mayor precisión. Esto demuestra el creciente peligro de la guerra no convencional en la región, involucrando a grupos como los rebeldes hutíes. Su demora en admitir los ataques parece ser una táctica para confundir las reacciones internacionales.

El número de ataques en el Mar Rojo ha aumentado, lo que hace menos segura la navegación para los barcos. Para enfrentar esta situación, Estados Unidos ha enviado al USS Abraham Lincoln y otros recursos militares a la zona. El objetivo es proteger a los barcos comerciales y ayudar a sus aliados a resistir a las fuerzas hutíes.

El rescate de los 29 marineros destaca la necesidad urgente de que los países colaboren para salvar vidas en el mar. Asimismo, cuestiona la efectividad de las normativas de seguridad actuales y sugiere la necesidad de tomar acciones más contundentes para proteger las rutas marítimas vitales. La participación de la fuerza naval de la UE demuestra un esfuerzo conjunto para abordar un problema de seguridad creciente que trasciende lo local.

Esta situación requiere un enfoque integral que incluya acciones diplomáticas, militares y económicas para resolver los problemas subyacentes del conflicto y evitar que empeore. Reducir la capacidad de los hutíes para llevar a cabo ataques implica cortar su suministro de armas y abordar la inestabilidad geopolítica más amplia que impulsa estos conflictos.