Crisis en Sudán: barreras y lluvias agravan la hambruna
MadridVeintiséis millones de personas en Sudán están pasando mucha hambre porque la ayuda está bloqueada. Desde mayo, la ONU y sus socios han proporcionado alimentos a 2.5 millones de los más necesitados. Ahora, han surgido nuevos problemas. Suministros como medicamentos y tabletas de purificación de agua están listos para ser enviados a Zamzam. Sin embargo, las fuertes lluvias han inundado la única ruta transfronteriza permitida desde el este de Chad, lo que está causando retrasos.
Puntos clave:
- Los suministros de ayuda incluyen medicinas esenciales y productos nutricionales.
- Las rutas transfronterizas inundadas han retrasado los envíos de ayuda.
- Los trabajadores humanitarios enfrentan acoso y ataques.
- Persisten importantes déficits de financiamiento, con solo el 33% de los $2.7 mil millones necesarios recaudados.
- El embajador sudanés ante la ONU cuestiona los reclamos humanitarios y culpa a las prácticas paramilitares.
La situación en Sudán es sombría. Los trabajadores humanitarios sufren acoso y ataques. Los convoyes de suministros enfrentan saqueos y extorsión. El embajador sudanés ante la ONU, Mohamed Ibrahim Elbahi, acusa a la ONU de minimizar los saqueos por parte de grupos paramilitares. Afirma que recientemente fueron robados más de 4,000 litros de combustible de un convoy de la ONU.
La financiación humanitaria es insuficiente. El llamado de ayuda para Sudán ha recibido solo $883 millones de los $2.7 mil millones necesarios, lo que representa apenas el 33% de lo requerido. Wosornu y Omollo han instado a los miembros del Consejo de Seguridad a aumentar los fondos. Subrayan la importancia de convencer a las partes en conflicto para que cesen los combates y permitan que la ayuda cruce las fronteras.
Stephen Omollo, subdirector del Programa Mundial de Alimentos, anunció que la agencia asistirá a las personas en Sudán que sufren de hambre extrema. El PMA planea ampliar su labor en todo el país, aumentando su capacidad, presencia y recursos. Además, continuarán proporcionando alimentos y dinero a los refugiados en Chad, Sudán del Sur y Libia.
La ONU tiene planes de entregar más de $100 millones en efectivo y vales antes de finalizar el año. A pesar de sus esfuerzos por aumentar la ayuda, los trabajadores humanitarios enfrentan numerosos desafíos. Les resulta difícil obtener los suministros necesarios debido a obstáculos ambientales y políticos.
Las autoridades sudanesas aseguran haber cooperado eficazmente con la ONU. Señalan la apertura de nueve pasos fronterizos este año y la concesión de visas a miles de trabajadores humanitarios. Niegan haber detenido cualquier entrega de ayuda.
Elbahi afirmó que no hay hambruna en el campamento de Zamzam. Sostuvo que los expertos mencionan una hambruna por razones políticas para castigar a las autoridades sudanesas.
El conflicto persistente y la escasez de recursos en Sudán son problemas graves. Sin apoyo para los esfuerzos humanitarios, más vidas estarán en peligro. La comunidad internacional necesita proporcionar más ayuda y ejercer presión sobre las partes en conflicto. Esta es la única manera de ayudar a los millones de personas que padecen hambre en Sudán.
Ayer · 17:18
Ciclones y su sombra mortal: impacto perdurable
Compartir este artículo