Misil ruso incendia Sumy mientras Ucrania avanza en Kursk, Rusia

MadridUn misil ruso impactó en Sumy el sábado, provocando un incendio. Dos personas resultaron heridas y los vehículos y edificios cercanos sufrieron daños. El ataque incluyó un misil de crucero Iskander-K y una bomba aérea. La fuerza aérea ucraniana también informó haber derribado 14 drones rusos durante la noche, algunos de ellos en la zona de Kyiv.

Las fuerzas ucranianas han logrado un avance notable en la región rusa de Kursk desde su despliegue el 6 de agosto. Este movimiento busca desviar la atención militar rusa del frente en Ucrania. El reportero militar Alexander Kots indicó en Telegram que, aunque la mayoría de los frentes se han estabilizado, aún hay zonas donde los ucranianos siguen avanzando.

La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, declaró que Ucrania utilizó cohetes HIMARS fabricados en EE.UU. para destruir un puente sobre el río Seim en Kursk. Esta fue la primera vez que se emplearon HIMARS en la región de Kursk. Aunque no se pudo verificar de manera independiente, el Instituto para el Estudio de la Guerra confirmó el hecho con imágenes geolocalizadas que mostraban el puente colapsado tras el ataque.

Los puentes dañados podrían impactar las rutas de suministro rusas, pero no las cortarán por completo. Algunos bloggers militares afirman que todavía se pueden utilizar puentes más pequeños y pontones para el transporte de suministros. El río Seim no es tan grande como otros ríos ucranianos, como el Dniéper.

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Esta incursión en la región de Kursk es relevante por varios motivos:

1. El tamaño y velocidad de la operación
2. La participación de brigadas ucranianas con experiencia
3. El tiempo que las tropas ucranianas han permanecido dentro de Rusia

Expertos militares occidentales estiman que hasta 10,000 soldados ucranianos forman parte de esta misión. El objetivo de este gran despliegue es debilitar a las fuerzas rusas y desviar su atención de otras áreas cruciales en Ucrania.

El combate en Kursk marca una nueva fase en el conflicto. La presión continua en esta área pone a prueba la capacidad de defensa de Rusia, al tiempo que mantiene sus posiciones en Ucrania. Las fuerzas ucranianas no solo están respondiendo, sino que están tomando medidas activas para interrumpir las líneas de suministro rusas y sus tácticas.

Las fuerzas ucranianas avanzando en zonas rusas indican cambios en el conflicto. Esto podría obligar a Rusia a modificar sus planes militares y cómo utiliza sus recursos. Los puentes destruidos y otras infraestructuras críticas dificultan el traslado de suministros y tropas rusas.