Hamás niega colapso, afirma supervivencia de su jefe militar
MadridHamas niega que las negociaciones del alto el fuego hayan cesado tras un reciente ataque israelí. Jihad Taha, portavoz de Hamas, afirmó que las conversaciones aún continúan. Admitió que la reciente violencia afectaría las negociaciones, pero enfatizó que los mediadores siguen trabajando.
- Continúan las negociaciones de alto el fuego, afirma Hamas.
- Ataque israelí tiene como objetivo a Mohammed Deif, jefe militar de Hamas.
- Supervivientes y testigos relatan caos y terror.
- Netanyahu asegura que los líderes de Hamas están "marcados para morir".
- Las restricciones en la ayuda humanitaria empeoran las condiciones.
Netanyahu afirmó que atacar a los líderes de Hamas llevaría al grupo a aceptar un alto el fuego. Mencionó que todos los líderes de Hamas son objetivos. Funcionarios políticos de Hamas dijeron que la comunicación entre los líderes dentro y fuera de Gaza continúa después del ataque en el sur. Testigos informaron que el ataque golpeó una zona que Israel había marcado como "segura" para los palestinos desplazados.
El reciente ataque israelí dejó al menos 300 heridos, convirtiéndolo en uno de los más mortales en el conflicto actual. Esta guerra comenzó después de que Hamas atacara el sur de Israel el 7 de octubre, matando a aproximadamente 1.200 personas y tomando más de 200 rehenes.
Este conflicto ha experimentado numerosas interrupciones en las negociaciones de paz. En el pasado, cualquier asesinato importante o ataque de gran envergadura rápidamente desencadenaba acciones de venganza, afectando la situación general. Ambas partes permanecen en un estado de lucha sin obtener una ventaja duradera, lo que provoca un sufrimiento constante para los civiles.
El ataque de Israel a una zona considerada "segura" empeora la situación humanitaria. Los palestinos desplazados en estas áreas empiezan a perder la confianza. Esta desconfianza debilita cualquier esfuerzo humanitario en marcha.
Hamas afirma que su líder militar, Mohammed Deif, sobrevivió a un ataque aéreo, lo cual complica aún más la situación. Si Deif está vivo, podría aumentar la moral de Hamas, a pesar de que el ataque fue muy perjudicial. Israel no está seguro de haber alcanzado el objetivo correcto, lo que añade más incertidumbre al panorama.
A pesar de las terribles escenas y numerosas muertes, las negociaciones de alto el fuego continúan. Ambas partes buscan obtener mejores condiciones para sí mismas. La situación revela un ciclo triste de ataques, contraataques y sufrimiento, con pocas posibilidades de una solución rápida. Este conflicto constante genera grandes problemas humanitarios, exigiendo esfuerzos internacionales más fuertes y una comunicación clara.
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