Misterios del agua de Arima: señal de sismos
MadridLos baños termales de Arima, en Kobe, Japón, se encuentran sobre actividades geológicas que podrían haber ocasionado el terremoto de Kobe en 1995. Las aguas termales son muy saladas, con una salinidad más del doble que la del agua de mar, y se cree que provienen de la placa del Mar de Filipinas. Los científicos han confirmado este vínculo mediante análisis isotópicos, que muestran una conexión entre las termas y los movimientos tectónicos.
Científicos estudian cómo el agua de las placas tectónicas influye en los terremotos. Investigaciones sobre el agua en Arima revelan que la cantidad de esta se redujo tras la perforación de numerosos pozos en la década de 1940. Sin embargo, antes del terremoto de 1995, se observó un aumento inesperado del agua. Estos cambios en el agua subterránea podrían ser señales tempranas de terremotos, ya que pueden afectar las fallas tectónicas.
Por qué es importante:
- Las corrientes subterráneas de agua de origen tectónico pueden modificar la presión en el interior de la corteza terrestre.
- Estos cambios pueden debilitar las zonas de falla y potencialmente desencadenar terremotos.
- Observar la composición química de las aguas termales podría ofrecer señales de alerta temprana ante eventos sísmicos.
- Este fenómeno no es exclusivo de Arima, ya que el enjambre sísmico de Matsushiro mostró situaciones similares.
Los riesgos sísmicos no se limitan solo al área de Kobe. En la década de 1960, una serie de sismos conocida como el enjambre sísmico de Matsushiro mostró características similares. Se descubrió que el agua de las placas subterráneas representaba una parte importante de las aguas termales locales. Esto sugiere que los movimientos de agua subterránea podrían ayudar a predecir riesgos sísmicos en regiones con una geología similar.
Utilizar la información sobre la composición isotópica del agua en las placas tectónicas puede mejorar las maneras de predecir los terremotos. Al comprender cómo se mueve el agua a través de fallas y grietas, los sistemas de alerta temprana pueden volverse más precisos. Los científicos podrían emplear estos datos para crear mejores modelos, lo que conduciría a nuevos métodos para prever la actividad sísmica.
Estos resultados destacan la importancia de la colaboración entre diversas disciplinas científicas, como la geología, la hidrología y la sismología. Al profundizar en el estudio del movimiento del agua subterránea, los científicos pueden idear nuevas formas para mitigar los riesgos sísmicos. La cooperación interdisciplinaria podría convertir a los manantiales de agua caliente en sitios clave para la investigación de terremotos.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1038/s43247-024-01606-1y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Tsutomu Yamanaka, Ikuya Adachi. Hot springs reflect the flooding of slab-derived water as a trigger of earthquakes. Communications Earth & Environment, 2024; 5 (1) DOI: 10.1038/s43247-024-01606-1Compartir este artículo