Reelección de Tebboune en Argelia rodeada de polémica y participación
MadridEl presidente argelino Abdelmadjid Tebboune ha sido reelegido para un segundo mandato tras unas elecciones muy disputadas. Esta vez su victoria ha sido mucho más contundente que en 2019, cuando obtuvo el 58% de los votos. Hasta la tarde del domingo, no se conocían las cifras exactas ni la participación electoral. Los primeros informes señalan una participación del 48% en Argelia y del 19,6% en los distritos electorales en el extranjero.
Argelia es el país más grande de África por superficie y alberga a casi 45 millones de personas. Es el segundo país más poblado del continente, después de Sudáfrica, y celebra sus elecciones presidenciales en un año en el que se llevarán a cabo más de 50 elecciones en todo el mundo en 2024.
Durante la temporada de campaña, se informaron casos de represión. Activistas y organizaciones como Amnistía Internacional alzaron la voz sobre la situación. Señalaron los malos tratos y las acciones legales contra miembros de la oposición, periodistas y grupos de la sociedad civil. Afirmaron que la elección solo mantiene el sistema político actual.
Tebboune y sus dos contendientes instaron a una mayor participación política, enfocándose especialmente en los jóvenes, que constituyen una gran parte de la población de Argelia y enfrentan altos niveles de pobreza y desempleo. Cada candidato prometió resolver estos problemas cruciales durante sus campañas.
Puntos clave durante el período electoral:
- Denuncias de los opositores de Tebboune sobre irregularidades administrativas en el recuento de votos.
- Afirmaciones de la campaña del candidato islamista Abdelali Hassani Cherif de que se presionó a los trabajadores electorales para inflar las cifras.
- Mayor participación en comparación con el primer mandato de Tebboune, impulsada por llamamientos a la participación política a pesar de los llamados al boicot por parte de otros activistas.
Críticos temen que esta elección siga sin cambios, como en el pasado. Los manifestantes a favor de la democracia en su mayoría se mantuvieron al margen de las elecciones de 2019 que otorgaron a Tebboune su primer mandato. Sus protestas semanales lograron la destitución del ex presidente Abdelaziz Bouteflika después de 20 años en el poder.
La elección tuvo una mayor participación ciudadana, lo cual demuestra que tanto el gobierno como algunos grupos opositores lograron involucrar a los votantes. Sin embargo, las denuncias sobre problemas en la votación, tales como personas votando por otros y la falta de transparencia en el conteo de votos, hacen que la gente cuestione la validez de los resultados.
El próximo mandato de Tebboune probablemente se centrará en abordar los problemas económicos, especialmente para los jóvenes del país que están desempleados y en situación de pobreza. Tanto la comunidad internacional como los activistas locales están expectantes, esperando ver cambios reales en los sistemas político y económico de Argelia. Sigue siendo incierto si Tebboune podrá superar los obstáculos políticos existentes para cumplir sus promesas.
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