Rechazo a Duterte y Quiboloy en elecciones filipinas
MadridGrupos de derechos humanos están exhortando a los filipinos a no votar por el ex Presidente Rodrigo Duterte y el predicador Apollo Quiboloy en las próximas elecciones. Ambos enfrentan serias acusaciones y están envueltos en controversias. No obstante, la ley filipina permite que personas con cargos penales pendientes se presenten a las elecciones, salvo que hayan sido condenadas de forma definitiva y sin posibilidad de apelación. Esta normativa posibilita la participación de Duterte y Quiboloy en la contienda, lo cual ha disgustado a las organizaciones de derechos.
Duterte ha sido acusado de violaciones a los derechos humanos debido a su violenta campaña contra las drogas. Quiboloy enfrenta denuncias de abuso infantil y tráfico de personas tanto en Filipinas como en Estados Unidos. Diversos grupos de derechos humanos están organizando manifestaciones y campañas para oponerse a estas figuras. Advierten sobre el peligro de elegir como legisladores a individuos con acusaciones de delitos graves.
Rodrigo Duterte, actualmente con 79 años, es conocido por su estricta guerra contra las drogas, la cual, según muchos, provocó numerosas violaciones a los derechos humanos. Los informes oficiales indican que hubo más de 6,000 muertes debido a sus políticas, pero los grupos de derechos humanos creen que estas cifras no incluyen las muertes ocurridas cuando Duterte era alcalde de la ciudad de Davao y pueden no reflejar la cifra total. Sus seguidores valoran su enfoque duro, mientras que los críticos destacan que sus políticas crearon una cultura de impunidad. Los activistas exigen que se responsabilice a los culpables y enfatizan que postularse a cargos públicos no debería permitirle eludir la justicia.
Apollo Quiboloy se postula para un cargo político, lo que ha generado muchas discusiones. Es un líder religioso con gran influencia en Filipinas, pero enfrenta graves acusaciones en Estados Unidos, como tráfico sexual y coacción. A pesar de estas acusaciones, sigue teniendo numerosos seguidores en Filipinas. Algunas personas opinan que alguien con tales acusaciones no debería aspirar a un puesto político, argumentando que es importante contar con líderes sin controversias de este tipo y expresan inquietud sobre el tipo de liderazgo moral que se necesita en el gobierno.
La senadora Risa Hontiveros y activistas de derechos humanos sostienen que los líderes no deben tener historiales dudosos. Están llevando a cabo investigaciones públicas sobre las acusaciones de tráfico humano relacionadas con Quiboloy para resaltar la gravedad de estos delitos. Instan a los votantes a elegir con cautela y evitar candidatos con posibles problemas legales que puedan afectar su capacidad de gobernar de manera efectiva.
Las próximas elecciones son cruciales para Filipinas. Los ciudadanos deben decidir si respaldarán a candidatos con acusaciones en su contra o si prefieren líderes con altos estándares morales y éticos. Los resultados electorales podrían afectar las normas y principios éticos futuros de la política filipina.
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