Las cuidadoras históricas que transformaron su comunidad
MadridLa historiadora Emily Rhodes de la Universidad de Cambridge ha realizado un estudio sobre el papel de las mujeres como madres de acogida en la Inglaterra del siglo XVII. Analizando documentos de los tribunales locales de Lancashire, el estudio revela cómo estas mujeres, a menudo pobres, lograban obtener cierta influencia y manejar sistemas sociales complejos. En el siglo XVII, el acogimiento era un servicio social crucial, enfrentando desafíos similares a los de los sistemas de cuidado de menores actuales.
Principales conclusiones del estudio incluyen:
Mujeres actuaban como cuidadoras de acogida no oficiales, acogiendo a niños no familiares cuando se consideraba que los padres biológicos no eran aptos. Estas cuidadoras a menudo recibían asistencia social y a veces se veían obligadas a solicitar pagos a las autoridades locales. Las peticiones mostraban una mala gestión y falta de apoyo financiero por parte de los supervisores locales, lo que impulsaba a las mujeres a buscar justicia en los tribunales.
El estudio revela que los primeros cuidadores de acogida no solo recibían caridad, sino que también participaban activamente en sus comunidades. Ocupaban un lugar especial en el sistema de apoyo social y tenían más poder que la mayoría de las mujeres pobres de esa época. Este poder provenía de su rol crucial en el cuidado de niños vulnerables, lo que les permitía exigir un pago justo. En contraste, las madres biológicas que enfrentaban problemas similares tenían menos capacidad de negociación.
Los sistemas modernos de cuidado de crianza aún enfrentan problemas relacionados con la financiación y el apoyo a los cuidadores. Aunque estos sistemas han evolucionado con el tiempo, las dificultades que enfrentan los cuidadores tienen raíces antiguas, como explica Rhodes. Hoy en día, los cuidadores siguen luchando por un mejor apoyo financiero y reconocimiento, similares a los desafíos de antaño.
La situación de estas mujeres era compleja. Aunque la amabilidad era importante, cuidar de los niños tenía un impacto financiero considerable. Los pagos por el acogimiento eran más altos que el promedio de apoyo para los pobres, lo que indicaba que podría ser una buena decisión económica. Sin embargo, el trabajo social y emocional que implicaba era significativo. Las solicitudes de pago revelaban que muchas cuidadoras no recibían dinero durante largos períodos, asumiendo costos debido a la necesidad o la generosidad.
Mirar al pasado nos revela las dificultades continuas en los sistemas de cuidado social. También resalta la fortaleza y determinación de los cuidadores de acogida, tanto antiguos como actuales. Al aprender de la historia, podemos encontrar maneras de ofrecer un mejor apoyo a quienes cuidan de las personas más vulnerables en la sociedad hoy en día.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1080/1081602X.2024.2403346y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Emily Rhodes. Women as child carers: Arranging and compensating mothering in early modern Lancashire. The History of the Family, 2024; 1 DOI: 10.1080/1081602X.2024.2403346Compartir este artículo