Se prevé que Xi Jinping no asistirá a la inauguración de Trump.

MadridEs poco probable que el presidente chino Xi Jinping asista a la toma de posesión de Donald Trump. Generalmente, los líderes chinos no acuden a estas ceremonias. La relación entre Estados Unidos y China es compleja, con muchos desacuerdos en curso. No asistir no solo sigue el protocolo habitual, sino que también es una decisión cuidadosa. Asistir podría interpretarse como un respaldo a un líder extranjero, lo cual es complicado dado las tensiones actuales entre ambos países.

Varios factores influyen en esta decisión:

• No hay precedente de que líderes chinos asistan a inauguraciones en EE. UU.
• Riesgos potenciales debido a la lista de invitados, como la presencia de Taiwán.
• Inquietudes sobre futuras políticas estadounidenses, como posibles aranceles a productos chinos.
• La importancia de preservar la dignidad y seguridad del líder chino en el extranjero.

China considera a Taiwán como parte de su territorio y es cautelosa respecto a cualquier acción de EE. UU. que sugiera lo contrario. Si los representantes de Taiwán asistieran al evento, como lo hicieron en la investidura de Biden, esto podría molestar a China. Esta es una de las razones por las que Pekín sería prudente con la invitación.

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Durante el último mandato de Trump como presidente, hubo un gran conflicto comercial con China. Es posible que vuelvan a implementarse nuevos aranceles y políticas estrictas, ya que Trump ha elegido a personas con una postura dura hacia China para cargos importantes en el gobierno. Estas acciones hacen que China se mantenga cautelosa, ya que desean ver si la administración de Trump utilizará las mismas políticas económicas estrictas de anteriormente.

Para Pekín, es crucial demostrar respeto por su líder en el ámbito internacional. Las reuniones de alto nivel deben tener la formalidad de una visita de estado, algo que una inauguración no ofrece. Ser solo otro invitado en medio de las tensiones políticas estadounidenses no se alinea con los valores diplomáticos de China.

La administración de Trump podría planear un encuentro con Xi, pero aún no está claro cómo manejarán sus diferencias. China probablemente busca evitar conflictos innecesarios mientras se prepara para cualquier acción negativa de EE. UU. Los expertos consideran que China continuará interactuando con cuidado, centrando su atención en sus propios intereses nacionales y manteniendo la estabilidad de su economía, en lugar de tomar medidas que sean meramente simbólicas.