Dos décadas después, 'Baby 81' acepta su legado único
MadridHan pasado veinte años desde que el tsunami del Océano Índico impactó el sudeste asiático, generando numerosas historias trágicas e inspiradoras. Una de estas historias es la de Abilash Jayarasa, conocido popularmente como "Baby 81." Tras el desastre, fue separado de su familia y se enfrentó a una extensa lucha, ya que nueve familias lo reclamaron. Una prueba de ADN finalmente identificó a sus verdaderos padres, reuniéndolos y atrayendo la atención mundial.
Puntos clave sobre el recorrido de Abilash incluyen:
- Abilash fue uno de los sobrevivientes más jóvenes del tsunami, captando la atención internacional.
- La prueba de ADN fue un proceso raro y complicado en Sri Lanka en ese momento, lo que destaca los esfuerzos de sus padres para recuperarlo.
- Enfrentó desafíos al crecer, ya que el apodo "Baby 81" le siguió a lo largo de su vida.
- La historia de la familia resultó en consecuencias sociales y económicas no deseadas, incluyendo la exclusión de los esfuerzos de ayuda.
Abilash creció sintiéndose solo porque la gente estaba muy interesada en su historia. Los vecinos pensaban que su familia era rica debido a su reconocimiento en otros países, lo cual causó envidias y llevó a que la familia fuera excluida. Debido a esta percepción equivocada, no recibieron ayuda para reconstruirse después del tsunami, así que se vieron forzados a mudarse en busca de un nuevo comienzo.
A medida que Abilash crecía, pasó de sentir vergüenza por su pasado a aceptarlo. Reconoció la importancia de su historia y se sintió fortalecido por ella. Aceptó su identidad y se interesó en usar la tecnología para comprender mejor su historia. Sus estudios en tecnologías de la información le ayudaron a desarrollar este interés.
El padre de Abilash, Murugupillai Jayarasa, mantiene una actitud agradecida. A pesar de las dificultades y la atención mediática, desea enseñar a su familia a ser fuertes. Ha creado un memorial para las víctimas del tsunami, con el fin de recordar a los que fallecieron y valorar a quienes sobrevivieron. Sus acciones reflejan esperanza y la importancia de recordar a los demás.
La historia de Abilash demuestra cómo las personas pueden reconstruir sus vidas tras eventos terribles. Pasó de ser un niño perdido a un joven adulto decidido a hacer una diferencia positiva. Familias como los Jayarasas, que han superado grandes desastres, nos muestran la firme voluntad humana de seguir adelante a pesar de las adversidades.
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