Calor y humedad: los espacios verdes en la ciudad no siempre refrescan tanto

MadridUn estudio publicado en Nature Cities examina la relación entre la temperatura y la humedad en los parques urbanos. Investigadores de la Escuela de Medio Ambiente de Yale utilizaron nuevos sensores móviles para analizar 114 parques en 15 ciudades alrededor del mundo. Descubrieron que, aunque estos parques son más frescos que las áreas urbanas que los rodean durante el día, el aumento en la humedad puede a menudo anular este efecto de enfriamiento.

Principales conclusiones del estudio:

Espacios verdes bajan las temperaturas diurnas, pero incrementan la humedad. Este efecto sobre la temperatura y humedad provoca un cambio mínimo en la temperatura de bulbo húmedo. Durante la noche, los espacios verdes disminuyen tanto la temperatura como la humedad, especialmente en climas húmedos o intermedios.

Encontrar alivio del calor durante el día no siempre es sencillo. Los árboles proporcionan sombra, lo que ayuda a enfriar el suelo, pero también liberan humedad en el aire, aumentando la sensación de bochorno. Esta humedad adicional puede hacer que el calor se sienta más intenso y disminuir el efecto refrescante. En muchas ciudades, aunque los parques y calles con árboles parecen agradables en un día caluroso, la comodidad real que brindan podría no ser tan significativa como la gente espera.

Lea también:

Ayer · 20:31

Influencia genética en la forma del corazón revela riesgos de enfermedades cardiovasculares

Los urbanistas deben considerar tanto la humedad como la temperatura al diseñar ciudades. No basta con plantar árboles y arbustos; también es necesario implementar métodos para manejar la humedad. Incorporar elementos acuáticos, mejorar la circulación del aire, o seleccionar plantas que necesiten menos agua puede hacer que los espacios verdes sean más efectivos.

Por la noche, las circunstancias cambian. Sin la presencia del sol, el suelo y las plantas no mantienen el calor, lo que contribuye a que el ambiente sea más fresco y seco. Esto hace que las áreas verdes urbanas sean especialmente agradables para actividades al aire libre durante la noche, ya que ofrecen una temperatura agradable y menos humedad.

Estos resultados indican que los proyectos de reverdecimiento urbano requieren una planificación cuidadosa. Los urbanistas deben adaptar sus estrategias para adecuarse al clima específico de cada ciudad. Es fundamental tener en cuenta tanto la temperatura como la humedad para optimizar los efectos de enfriamiento de los espacios verdes. Este enfoque puede contribuir a reducir las temperaturas urbanas y mejorar la calidad de vida de los habitantes.