El huracán Helene deja a hogares sin seguro de inundación.

MadridResidentes del sureste de Estados Unidos enfrentan dificultades luego de que el Huracán Helene provocara graves inundaciones. Muchos de ellos carecen de un seguro contra inundaciones para cubrir los daños. La tormenta afectó zonas que normalmente no se inundan, subrayando la falta de seguros en áreas más alejadas de la costa.

Muchos propietarios piensan que su seguro de hogar los protegerá de todos los daños causados por huracanes, pero esto a menudo no es cierto. En áreas como el oeste de Carolina del Norte, Georgia y Tennessee, la gente se sorprendió por las graves inundaciones tras el paso del huracán Helene. El seguro de hogar estándar generalmente solo cubre daños por viento, no por inundaciones.

Daños por vientos de huracanes Daños causados por la caída de árboles Daños ocasionados por objetos voladores No suelen cubrirse: Daños por inundaciones

La Administración Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) gestiona el Programa Nacional de Seguros contra Inundaciones, que es la principal fuente de seguro para propietarios de viviendas. Muchas personas no adquieren este seguro porque creen que no están en riesgo de inundación. Este error se hace evidente cuando ocurren inundaciones en áreas inesperadas, destacando la necesidad de educar a los propietarios de viviendas sobre los riesgos de inundación y la importancia del seguro.

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El seguro privado se está volviendo menos accesible en zonas con alto riesgo de desastres naturales. A medida que el cambio climático empeora, muchas empresas privadas han dejado de ofrecer seguros contra inundaciones, obligando a los propietarios a depender de programas gubernamentales. Este problema es especialmente desafiante en estados como Florida, donde se han comenzado a utilizar seguros administrados por el estado debido al aumento de reclamaciones relacionadas con eventos climáticos.

El huracán Helene ha provocado daños económicos considerables. Si bien las compañías de seguros pueden gestionar las pérdidas, los propietarios de viviendas sin seguro contra inundaciones podrían enfrentar graves problemas financieros. La reconstrucción dependerá del apoyo de organizaciones benéficas y de las comunidades afectadas. Muchas familias sin el seguro adecuado tendrán dificultades para recuperarse, lo que podría llevarlas a perder sus hogares o declararse en bancarrota.

A medida que el cambio climático provoca tormentas más frecuentes e intensas, es crucial que los gobiernos, las compañías de seguros y los propietarios reconsideren sus estrategias de seguros. Existe una creciente necesidad de políticas que aborden los riesgos cambiantes que enfrentan las comunidades, asegurando que futuros desastres no resulten en problemas financieros para las familias.