Impresionante bioprinter 3D avanza la investigación de fármacos y promete un futuro más ético
MadridIngenieros biomédicos de la Universidad de Melbourne han desarrollado una innovadora bioimpresora 3D que representa un avance significativo en la investigación de fármacos. Esta bioimpresora puede recrear con precisión las estructuras de los tejidos humanos, incluyendo tejidos blandos como el cerebral y materiales más duros como el cartílago y el hueso. Se espera que esta tecnología mejore la investigación contra el cáncer al permitir a los científicos replicar órganos y tejidos con gran exactitud. Este progreso también podría conducir a descubrimientos de medicamentos más éticos al reducir potencialmente la necesidad de pruebas en animales.
Características destacadas de la bioprinters de la Universidad de Melbourne:
- Posicionamiento avanzado de células mediante ondas acústicas.
- Velocidades de impresión hasta 350 veces más rápidas que los métodos tradicionales.
- Impresión directa en placas de laboratorio estándar para asegurar integridad y esterilidad.
- Mejora en las tasas de supervivencia celular durante el proceso de impresión.
El método utiliza ondas sonoras generadas por una burbuja en movimiento para colocar con precisión células en estructuras impresas. Muchas de las técnicas actuales de bioimpresión no funcionan bien debido a que no organizan correctamente las células, lo cual es esencial para crear tejidos humanos funcionales. Este nuevo enfoque resuelve el problema de las limitaciones naturales en el alineamiento celular al proporcionar una estructura inicial similar a la organización de los tejidos humanos, lo que conlleva a mejores resultados en aplicaciones médicas.
Los bioprinters 3D tradicionales son lentos porque construyen capa por capa, lo que puede dañar las células debido a los largos tiempos de impresión. Al trasladar estas estructuras frágiles a placas de laboratorio, se pueden deteriorar aún más. La nueva técnica de la Universidad de Melbourne resuelve estos inconvenientes con un sistema rápido basado en luz que imprime con detalle a nivel celular en segundos, mejorando la precisión y la fiabilidad de los tejidos impresos.
Esta tecnología tiene beneficios que van más allá de la investigación sobre el cáncer. Funciona de manera rápida y precisa, lo que puede acelerar las pruebas y el desarrollo de medicamentos, ayudando a que los nuevos tratamientos lleguen a los pacientes más pronto. También disminuye la necesidad de realizar pruebas en animales, haciendo que la investigación sea más humana y eficiente. Esta tecnología está generando mucho interés en el campo médico, como lo demuestran las asociaciones con instituciones reconocidas como la Escuela de Medicina de Harvard y el Centro Oncológico Sloan Kettering.
Esta innovación mejora considerablemente la bioprintura 3D, representando un avance crucial en la ingeniería biomédica y acercando la investigación de laboratorio a su aplicación práctica en la medicina.
El estudio se publica aquí:
http://dx.doi.org/10.1038/s41586-024-08077-6y su cita oficial - incluidos autores y revista - es
Callum Vidler, Michael Halwes, Kirill Kolesnik, Philipp Segeritz, Matthew Mail, Anders J. Barlow, Emmanuelle M. Koehl, Anand Ramakrishnan, Lilith M. Caballero Aguilar, David R. Nisbet, Daniel J. Scott, Daniel E. Heath, Kenneth B. Crozier, David J. Collins. Dynamic interface printing. Nature, 2024; 634 (8036): 1096 DOI: 10.1038/s41586-024-08077-6Compartir este artículo