Protección urgente de infraestructuras en el Líbano ante ataque intensificado
MadridUn funcionario de la ONU ha instado a proteger la infraestructura vital de Líbano, como sus puertos y su aeropuerto, debido a las crecientes tensiones en Oriente Medio. Esta petición surge mientras Israel intensifica sus acciones militares en Líbano, lo que genera preocupación por más interrupciones en las ya tensas cadenas de suministro. La región enfrenta un desplazamiento significativo, con aproximadamente 1,2 millones de personas obligadas a desplazarse y un aumento en los precios de los alimentos.
En respuesta al conflicto, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha intensificado sus esfuerzos para brindar asistencia. La organización ha acumulado reservas de alimentos suficientes para apoyar a aproximadamente una quinta parte de la población de Líbano durante un mes. Aquí está el desglose de la situación:
El aeropuerto internacional de Líbano y sus principales puertos marítimos siguen funcionando, esenciales para importar alimentos y suministros. El Programa Mundial de Alimentos (PMA) está utilizando rutas alternativas para llevar alimentos al país, incluyendo envíos desde Jordania a través de Siria. Los ataques aéreos israelíes han afectado infraestructuras clave, interrumpiendo ciertas líneas de suministro, como el paso de Masnaa en la frontera entre Líbano y Siria. Además, la reducción de la asistencia alimentaria en Siria debido a la falta de fondos ha intensificado el desplazamiento de personas.
Cambio de Rutas: El Desafío del Programa Mundial de Alimentos
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) enfrenta grandes desafíos y está tratando de continuar su labor cambiando las rutas de suministro. Con el cierre del paso de Masnaa, la agencia ahora envía suministros a través del norte del Líbano. Sin embargo, esto ha complicado y encarecido el transporte. La demanda de reabrir pasos fronterizos clave resalta la importancia de contar con cadenas de suministro claras para asistir a quienes más lo necesitan.
Líbano enfrenta una crisis económica que ha provocado un aumento de precios y la devaluación de su moneda, haciendo que los productos básicos sean difíciles de adquirir. Al mismo tiempo, los problemas políticos complican la llegada de ayuda a quienes más la necesitan. El papel del Programa Mundial de Alimentos es crucial para mantener un suministro constante de alimentos y apoyar a las personas desplazadas que afrontan estas dificultades.
El conflicto ejerce una gran presión sobre la infraestructura de Líbano. Si sus puertos o el aeropuerto sufren daños, podría afectar gravemente la capacidad del Programa Mundial de Alimentos para distribuir ayuda. A medida que la violencia sigue aumentando, la comunidad internacional está llamada a exigir la protección de estas instalaciones cruciales para asegurar que la población libanesa reciba la asistencia necesaria sin interrupciones.
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