Las empresas chinas se expanden rápidamente en el sur global
La influencia de China en los negocios globales está aumentando rápidamente según el WSJ.
Las empresas multinacionales occidentales ahora enfrentan nueva competencia. Las compañías chinas están creciendo rápidamente en los países en desarrollo del sur global. Este cambio tendrá efectos significativos en el comercio mundial.
Las empresas chinas son ahora jugadoras importantes en diversas industrias:
- Transsion, una empresa de electrónica, produce la mitad de los teléfonos inteligentes vendidos en África.
- Mindray es líder en sistemas de monitoreo de pacientes en América Latina.
- Los fabricantes chinos de vehículos eléctricos están expandiéndose en los países en desarrollo.
Las empresas chinas están apuntando a los 5 mil millones de personas en países en desarrollo. Desde 2016, sus ventas en estas regiones se han cuadruplicado hasta alcanzar los 800 mil millones de dólares. Ahora venden más en países en desarrollo que en los países ricos. El año pasado, las nuevas inversiones de las empresas chinas en la construcción de fábricas en el extranjero se triplicaron a 160 mil millones de dólares, centrándose en países como Malasia y Marruecos.
Factores del Crecimiento Chino
Las empresas chinas están expandiéndose a otros países por varias razones. Una de ellas es que el mercado interno está experimentando un crecimiento económico más lento y una competencia feroz. Además, buscan disminuir la influencia de las compañías occidentales en mercados en crecimiento como Indonesia y Nigeria.
Las políticas de los países occidentales y las acciones del gobierno chino están influyendo en este crecimiento. Las restricciones comerciales en naciones ricas, especialmente sobre productos chinos como vehículos eléctricos y paneles solares, están incentivando a las empresas chinas a trasladar su producción a países en desarrollo. Además, la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China ha llevado a inversiones en infraestructura por valor de $1 billón, aumentando la influencia china en estos países.
Los responsables de políticas globales pueden aprender de este crecimiento. Productos asequibles, como los teléfonos inteligentes de $100 de Transsion y dispositivos médicos económicos, pueden mejorar la vida de miles de millones de personas. El fácil acceso a tecnologías amigables con el clima puede ayudar a los países en desarrollo a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y hacer crecer sus economías.
Los responsables de políticas en los países en desarrollo deben considerar cómo los temas globales afectan sus regiones. Es crucial que formulen estrategias que enfrenten estos desafíos y promuevan el crecimiento, asegurando un desarrollo sostenible y mejorando la vida de sus ciudadanos.
Los gobiernos locales en países en desarrollo deben actuar con precaución. Tienen la posibilidad de ayudar a los consumidores, generar empleo y fomentar nuevas ideas. Deben encontrar un equilibrio entre imponer barreras comerciales estrictas y no hacer nada. Por ejemplo, los altos impuestos de Brasil sobre vehículos eléctricos podrían impedir beneficios para los consumidores y proteger negocios locales ineficientes. No obstante, estos países tampoco deberían ser demasiado laxos. Problemas como deudas impagas en Brasil o la falta de empleos locales por parte de compañías chinas podrían surgir.
Se puede incentivar a las empresas chinas a contratar más trabajadores locales y a compartir su tecnología. Este enfoque podría reflejar el éxito de las empresas estadounidenses y japonesas, que también han establecido vínculos locales y programas de capacitación.
Los gobiernos occidentales podrían necesitar reconsiderar su enfoque exclusivo en sus propios países. Anteriormente respaldaban la globalización, pero ahora están retrocediendo para proteger a las empresas locales de la competencia china. Comprender cómo afectará este cambio al comercio global llevará tiempo.
Las empresas chinas están prosperando en los mercados de más rápido crecimiento a nivel mundial, mientras que las compañías occidentales están perdiendo su posición. Los responsables políticos de todo el mundo deberían prestar atención a estos cambios y ajustar sus estrategias según sea necesario.
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