Atacante en Múnich disparó contra consulado israelí según informe policial
MadridInvestigadores informan que el tirador abatido en Múnich había disparado contra el Consulado de Israel. La fiscal Gabriele Tilmann menciona que creen que podría haber tenido un motivo islamista o antisemita, pero no han encontrado pruebas concretas para confirmarlo. Aunque actuó solo, las autoridades están investigando si tenía conexiones con otras personas.
Franz Ruf, director de seguridad pública de Austria, declaró que tras registrar la casa del hombre, la policía encontró varios dispositivos de almacenamiento de datos, pero ni armas ni propaganda del Estado Islámico. El individuo había comprado una pistola, una bayoneta y alrededor de 50 balas por €400 a un coleccionista de armas. Esta situación genera inquietudes sobre la capacidad de Austria para monitorear y controlar las amenazas conocidas.
Puntos clave de la investigación:
- Un hombre armado atacó el Consulado de Israel en Múnich.
- Los investigadores sugieren un motivo islamista o antisemita.
- No se han encontrado pruebas que lo vinculen a una red.
- El agresor ya había sido señalado por la policía austríaca.
- Una investigación previa sobre sus actividades radicales se cerró en abril de 2023.
- Tenía prohibición de armas hasta 2028, pero adquirió un arma ilegalmente.
El ataque ha demostrado la dificultad que tiene Austria para seguir a personas sospechosas de tener vínculos terroristas. La policía austriaca informó que el atacante llamó su atención en febrero de 2023 porque actuaba de manera amenazante y podría estar involucrado en un grupo terrorista. Aunque tenía prohibido poseer armas, logró obtener una de manera ilegal. Esto sugiere que existen problemas con la vigilancia y la aplicación de las prohibiciones.
Las autoridades dejaron de investigar sus acciones en abril, pero esto parece prematuro dado el ataque. Ruf señaló que el atacante mostraba signos de radicalización, como el uso de la bandera de un grupo extremista islámico en internet. Este comportamiento por sí solo debería haber llevado a una vigilancia continua.
Los padres del tirador denunciaron su desaparición aproximadamente una hora después del atentado en Múnich, cuando no se presentó a su nuevo trabajo. A pesar de su historial de amenazas violentas y actividades terroristas sospechosas, había sido empleado recientemente. Esto demuestra que las unidades antiterroristas y los servicios sociales necesitan una mejor coordinación.
Investigar al coleccionista de armas que vendió el arma al atacante es crucial. El coleccionista podría conocer el historial del comprador, lo que podría revelar la existencia de un grupo más grande que suministra armas a personas con ideas extremistas.
Después del ataque, los esfuerzos se centran en comprender las motivaciones e historia del atacante. Este suceso pone de manifiesto la necesidad de mejores mecanismos para rastrear y gestionar a los posibles radicales. Una mayor colaboración entre agencias podría impedir que estas personas pasen desapercibidas.
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