Migrantes mexicanos sufren por nuevas restricciones de asilo bajo Biden

MadridLas nuevas normas de la administración Biden están dificultando que los migrantes mexicanos soliciten asilo. Alejandro Mayorkas, el Secretario de Seguridad Nacional, anunció que ahora es más sencillo devolver a las personas a algunos países. Estados Unidos está intentando que más naciones acepten a sus ciudadanos deportados, lo que implica enfrentar cuestiones como la diplomacia y la obtención rápida de documentos de viaje.

En mayo, el 38% de los arrestados en la frontera eran mexicanos, en comparación con el 85% en 2011. El sector de Tucson registró el mayor número de cruces ilegales en el último año, con casi el 75% de los arrestos el mes pasado involucrando a mexicanos.

Los migrantes mexicanos a menudo cruzan cerca de Nogales, Arizona. Algunos utilizan escaleras para superar el muro y tratan de mezclarse rápidamente. Otros se entregan para solicitar asilo. La suspensión del proceso de asilo ha complicado más su situación.

Desde finales de 2022, los agentes de la Patrulla Fronteriza han enfrentado varios desafíos. En particular, han encontrado dificultades para deportar a personas provenientes de países como Cuba, Mauritania, Guinea y Senegal.

Muchos migrantes de estos países cruzan cerca de Lukeville y luego toman un autobús hacia un centro de procesamiento en Tucson. Los mexicanos suelen cruzar más cerca de Tucson. Algunos son llevados a la estación de la Patrulla Fronteriza en Nogales, donde pueden ser retenidos durante seis días si buscan protección bajo acuerdos internacionales. La mayoría son trasladados a grandes carpas cerca del Aeropuerto Internacional de Tucson. Estas carpas pueden albergar a 1,000 personas, incluyendo adultos solteros y familias. Los migrantes esperan en estas carpas para sus entrevistas de evaluación.

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Los migrantes tienen un periodo de cuatro horas para llamar a sus abogados durante las entrevistas de selección. Cada entrevista dura aproximadamente 90 minutos. Antes de que la administración de Biden suspendiera el asilo, estas entrevistas no se realizaban en el centro, lo que resultaba en la liberación de muchos migrantes con órdenes de presentarse en la corte de inmigración de EE.UU. Ahora, más migrantes son evaluados y deportados de vuelta a Nogales, México, si no pasan las entrevistas.

Francisco Loureiro, que dirige el albergue San Juan Bosco en Nogales, comenta que cada vez más migrantes intentan evitar ser capturados porque saben que serán devueltos. Un migrante deportado rápidamente aceptó la oferta de un traficante para cruzar de nuevo la frontera. Marcelo Ruiz, otro migrante en el albergue, expresó su frustración sobre el proceso de entrevista, diciendo que no había oportunidad de explicar sus miedos con detalle.

Mayorkas reconoce que ha habido quejas sobre el proceso de selección en el pasado. Sin embargo, está convencido de que los agentes y oficiales están cumpliendo con las normas.

Araceli Martínez, una migrante, mencionó que nadie le preguntó si tenía miedo de regresar a casa. Ella teme volver con su hija a un esposo abusivo. Con las nuevas normas, los migrantes tienen que expresarse primero o mostrar que están angustiados. Martínez quiere que otros sepan que buscar asilo es casi imposible ahora.

Los migrantes mexicanos ahora enfrentan deportaciones más rápidas y controles más estrictos.